El juez imputa al jefe de informática del Poder Judicial
El juez del caso Villarejo ha reactivado en los últimos días otra de las nueve piezas que componen el macrosumario de la causa: la bautizada como Land, en la que se investigan los trabajos del comisario jubilado para la empresaria Susana García Cereceda, hija del promotor de la urbanización de lujo La Finca, en Madrid. En un auto en el que cita a declarar a los siete perjudicados —entre ellos la hermana de la empresaria y la juez madrileña Mónica Gómez Ferrer—, el magistrado eleva el número de imputados con otros tres supuestos topos usados por la trama para obtener información confidencial de bases de datos oficiales. Se trata de Juan Carlos Garcés Pérez, Juana Navas Mendiola e Isabel González Cabezas.
Garcés Pérez es desde febrero de 2016 jefe de la sección de Informática Judicial del Consejo General del Poder Judicial y pertenece al cuerpo superior de Sistemas y Tecnologías de la Administración
General del Estado. Su puesto le da acceso a los datos internos del órgano de gobierno de los jueces sobre todos los magistrados españoles.
El auto destaca que recibieron “dádivas”. Con ellos, ya son diez los supuestos topos que han sido encausados, la mayoría policías. El juez también imputa por estos hechos al comisario Enrique García Castaño y al inspector jefe Juan José Díez, ya investigados en otras piezas de la causa.
El Consejo de Ministros tiene previsto desclasificar hoy la segunda tanda de documentos localizados en los archivos de la Policía Nacional sobre el espionaje al extesorero del PP Luis Bárcenas.