Luz verde para salir de la tutela de Bruselas
“Un antes y un después”. La ministra de Economía, Nadia Calviño, sostuvo que eso es lo que marca la decisión, ya completamente definitiva, de sacar a España del procedimiento de déficit excesivo tras haber rebajado su desfase presupuestario por debajo del 3% del PIB que marca el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.
“Es una muy buena noticia que finalmente diez años después y después de tanto esfuerzo por parte de toda la población española nuestro país salga del procedimiento por déficit excesivo”, agregó Calviño.
A partir de ahora, España pasará a estar en el llamado “brazo preventivo” de la UE. Y ahí se mirará sobre todo si cumple con la regla de reducción de la deuda y realiza los ajustes estructurales necesarios, es decir, si va equilibrando sus cuentas con independencia del ciclo económico.
al país de la cuota de cofinanciación con que debe contribuir a ellos, direccionando hacia Atenas inversiones del plan Juncker.
Por ello, la mejor noticia de la noticia de ayer es que se haya producido: aunque falten detalles trascendentes.
Como su cuantía, el calendario del despliegue, y sus ramificaciones: si de ese presupuesto colgará por ejemplo un seguro (o reaseguro) de desempleo europeo, como han propugnado los más europeístas y como España viene impulsando. Que nazca, el presupuesto, ya se rellenarán.
Hace aproximadamente un año, los países de militancia austeritaria de la nueva liga hanseática, capitaneados por Holanda, casi enterraron el proyecto. Resucitó, gracias al esfuerzo triangular de Berlín, París y Madrid.
Y ahora se concreta: con inversiones (y no solo apoyo a reformas), sin condicionalidades añadidas, con el posible recurso estabilizador de excepcionar las cuotas de cofinanciación. Será modesto. Pero será.