Una exposición para reclamar una disculpa de Países Bajos
Los indígenas que poblaban el actual Manhattan antes de la colonización holandesa organizan una muestra en Ámsterdam y piden una reparación
Hace 400 años, unos emigrantes llegados de los actuales Países Bajos se instalaron en el extremo sur de la isla de Manhattan y fundaron Nueva Ámsterdam. En 1664, los ingleses tomaron posesión del asentamiento, que creció hasta convertirse en Nueva York. Para los lenape, habitantes originarios, la colonización supuso la pérdida de sus tierras y casi su desaparición. Hoy quedan unos 20.000 descendientes. Ahora exigen al Gobierno neerlandés una compensación y una disculpa, apoyados en una exposición del Museo de Ámsterdam.
El Museo de Ámsterdam, el Museo de la Ciudad de Nueva York y representantes de las cuatro
naciones lenape se han unido para organizar la muestra, que lleva en su título el nombre originario de Manhattan: ¿Manahahtáanung o Nueva Ámsterdam? La historia indígena detrás de Nueva York, y que recupera la voz de una comunidad “que regresa 400 años después para entablar un diálogo”, explica Brent Stonefish, líder espiritual de la nación Delaware, “porque con la colonización perdimos nuestra tierra y sufrió nuestra cultura y lengua”. Las cuatro naciones lenape están reconocidas por el Gobierno de EE UU.
Los lenape subrayan que han resistido y que el canal museístico facilita hablar del pasado.
Pero hay dos protagonistas desiguales, el Estado neerlandés, y cuatro naciones que se consideran soberanas pero carecen de una representación en las instituciones internacionales.
Los lenape vivían en la costa atlántica, al noreste de los hoy EE UU. En 1609, la Compañía Neerlandesa de las Indias Orientales encargó al explorador inglés Henry Hudson que buscara un posible paso del noreste hacia Asia. Tras varias peripecias, fondeó frente a la isla de Manhattan. En 1624, los colonos neerlandeses, desembarcaron gracias a otra firma, la Compañía de las Indias Occidentales, para habitar la colonia.
En el Archivo Nacional de Países Bajos hay una carta, fechada el 5 de noviembre de 1626,
que informa de la compra de la isla de Manhattan a los nativos. “La compraron mercaderes neerlandeses por 60 florines”, reza la nota. Al cambio actual serían unos 24 dólares. Los lenape desconocían el comercio de tierras y para la comunidad no debió de ser más que un permiso temporal. No renunciaron a vivir en su territorio, pero fueron apartados a la fuerza. “Nos masacraron. Pensar que nuestros antepasados vendieron la tierra por baratijas es una forma de decir que eran incivilizados. Reconocer que aquello fue un error [de Países Bajos] permitiría descansar a nuestros ancestros”, asegura Stonefish.