El Deportivo, a la final por el ascenso
El equipo gallego somete al Málaga y espera hoy rival: Mallorca o Albacete
Málaga: Munir; Cifuentes (Pacheco, m. 83) , Luis Hernández, Pau Torres, Juankar; Hicham (Renato, m. 46), Bare, Adrián, Ontiveros; Harper (Koné, m. 56) y Blanco Leschuk. No utilizados: Kieszek; Diego González, Ricca y Morán.
Deportivo: Dani; Bóveda, Duarte, Somma, Saúl; Álex Bergantiños, Expósito; Pedro, Vicente Gómez (Fede, m. 52), Nahuel (Borja Valle, m. 57); y Carlos Fernández (Quique, m. 71). No utilizados: Ortolà; Simón, Mosquera y Caballo.
Gol: 0-1. M. 82. Bergantiños dispara desde fuera del área y el balón se le escapa a Munir.
Árbitro: Díaz de Mera. Mostró tarjetas amarillas a a Luis Hernández, Bóveda, Carlos Fernández, Bare, Dani, Adrián y Ontiveros.
La Rosaleda. Lleno. Unos 30.000 espectadores. El Deportivo pasa a la final por el ascenso tras haber vencido ya en la ida en Riazor por 4-2. El Deportivo, con mucho oficio y un excelente trabajo defensivo, se clasificó para la final por el ascenso a Primera. El cuadro gallego, que tenían una ventaja de 4-2 de la ida, no necesitó un brutal despliegue para someter a un Málaga que solo vivió de los escarceos de Ontiveros, que lanzó dos balones a los palos. Tras sufrir algo en los albores del partido, el Deportivo se asentó con una impecable labor de sus centrales y sus dos pivotes, Bergantiños y Expósito. El Málaga lo intentó, pero le faltó fútbol y se encomendó demasiado a Ontiveros. En estas eliminatorias conviene aprovechar los momentos decisivos y el Málaga tuvo sus opciones en la ida, donde se enterró en un segundo tiempo muy flojo. El Deportivo estuvo a un buen nivel en la segunda parte, actuando con aplomo y oficio, hasta acabar marcando un gol de Bergantiños después de una pifia de Munir, ya mal en Riazor.
Al Málaga le queda el triste consuelo de los balones a los palos lanzados por Ontiveros, pero, en el cómputo global, fue inferior al Deportivo, que supo jugar con mucha más inteligencia. En La Rosaleda supo sufrir para luego imponerse, muy superior en el centro del campo, la parcela que Víctor sacrificó para poder entrar por las bandas y alborotar el choque. El equipo gallego, seguro y fiable, sigue adelante en su pelea por regresar a Primera División. Al Málaga no le queda otra que esperar al próximo curso.
El Deportivo jugó mucho mejor en la segunda mitad. Encontró la fórmula para detener a Ontiveros y, sobre todo, para llevar el control del partido de manera más eficaz. Los nervios fueron atenazando al Málaga, al que se le escapaba la vida, hasta que Bergantiños robó un balón y le pegó desde fuera del área. Erró Munir y el gol acabó con la ilusión andaluza y su animada grada. El Deportivo, sexto clasificado, pudo con el tercero y llega muy fuerte a la final por el ascenso, que jugará con el Albacete o el Mallorca, que hoy juegan la vuelta de la otra eliminatoria (2-0 en la ida para los baleares).
La final empieza el próximo jueves en Riazor y se decide el próximo domingo en Palma o Albacete.