Oltra rechaza dimitir y Puig espera que pacte su salida con Compromís
La vicepresidenta valenciana asegura que su postura es “ética, estética y política”
Valencia La presión sobre el Gobierno de la Comunidad Valenciana sigue en escalada. La negativa de la vicepresidenta, Mónica Oltra (de Compromís), a dimitir por su imputación en el supuesto encubrimiento del caso de su exmarido, condenado en 2019 por abusos sexuales en 2017 a una menor tutelada, ha elevado la tensión interna. El presidente valenciano, el socialista Ximo Puig, esperaba que Oltra no se enrocase y ahora confía en que acuerde una salida pactada con Compromís.
“Los tiempos políticos y judiciales a veces no coinciden”, había manifestado Puig a última hora de la tarde del jueves en Ontinyent. “Yo opto por la serenidad. Entiendo las urgencias mediáticas y de la oposición. Es evidente que hay que reflexionar. Yo tomaré las decisiones siempre en el interés de la Comunidad Valenciana”, agregó. La presión política y mediática es muy intensa y puede resultar insostenible en el tiempo por la erosión que acarreará al Consell formado por el PSPV-PSOE, Compromís y Unides Podem, apostillan fuentes de Presidencia.
“La presión se aguanta”, afirmó Oltra, que justificó su decisión de no dimitir por, entre otras razones, “la frase que define el auto” de su imputación del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) valenciano: “No existe prueba directa” de su vinculación con el presunto ocultamiento. “Soy coherente. Mi postura es ética, estética y política, no es una postura personal”, sostuvo, al tiempo que volvía a denunciar “la cacería” contra ella emprendida por la extrema derecha, en alusión a las denuncias del abogado ultra de la joven abusada, ahora mayor de edad, de una activista y antigua fundadora de Vox y de la propia personación de este partido.
No obstante, sus explicaciones no convencieron a sus socios de gobierno. Al contrario. Fuentes socialistas temen que el foco del problema se traslade al resto del Ejecutivo y en especial al presidente, Ximo Puig, quien si decide destituirla “unilateralmente”
puede provocar la caída del Gobierno de izquierdas, según amenazó a primera hora de ayer Compromís, formación a la que pertenece la también titular de la consejería de Igualdad y Políticas Inclusivas, gestora de los menores tutelados.
Las mismas fuentes apuntan que se confiaba en que Oltra diera un paso atrás y abandonara el cargo en un plazo corto para defenderse y volver a la primera línea política una vez desimputada, tras su declaración del 6 de julio ante TSJ. Se contemplaba la posibilidad de la delegación de sus competencias o el recambio por un compañero o una compañera de Compromís sin dejar el acta de diputada.
La hoja de ruta es buscar una salida pactada, presionar para que se tome conciencia de la situación problemática que afecta a todo el Gobierno, según fuentes socialistas. Y para ello consideran imprescindible que se abra una reflexión en el seno de la coalición Compromís para que los propios compañeros de Oltra actúen y tomen las decisiones menos malas. Después de ver cómo evoluciona la situación, la última palabra la tiene el presidente, apostillaron las mismas fuentes, que recuerdan que Puig ya provocó la dimisión del expresidente de la Diputación de Valencia, Jorge Rodríguez, y del exalcalde de Alicante, el también socialista Gabriel Echávarri, ambos imputados.
En este sentido, una voz autorizada de Compromís, el alcalde de Valencia, Joan Ribó, expresó tras conocer la decisión de Oltra la conveniencia de tratar el asunto la próxima semana en una reunión de la formación, que tieEn
Los argumentos de la dirigente no convencen a sus socios de gobierno
Joan Ribó cree conveniente una reunión del partido para tratar el tema