Victoria Beckham cumple 50: “Apenas estoy empezando”
La diseñadora celebra medio siglo de vida en su mejor momento, tras el éxito de sus firmas de belleza y moda
La relación de Victoria Beckham con la fama lleva décadas de recorrido. Pocas celebridades han conseguido mantener su popularidad a lo largo de los años tanto como ella, que se dio a conocer en la veintena y hoy cumple los 50. Primero, como estrella de la música con las Spice Girls, el grupo femenino que más discos ha vendido de la historia. Después, cuando dejó en pausa su carrera para formar una familia con David Beckham, la prensa explotó la imagen de una Victoria cabreada con el mundo, elitista y altiva. En la actualidad, su nombre se vincula a la industria de la moda, en la que debutó como diseñadora en 2008. Sin embargo, para muchos sigue siendo la mujer de David Beckham, algo que ella se toma con humor. Tanto es así que su firma tiene a la venta una camiseta blanca de manga corta donde se puede leer David’s wife (esposa de David), disponible por 110 libras (unos 129 euros).
Victoria nació en Essex en 1974, en una familia muy acomodada. Tal y como recoge la BBC, su vida cambió en 1993 cuando respondió a un anuncio en la revista The Stage en el que se buscaban chicas que supieran bailar y cantar para la formación de un grupo. Detrás de aquel llamamiento estaban Bob y Chris Herbert, padre e hijo representantes de artistas musicales. Los Herbert ficharon a Victoria Adams y a Melanie Chisholm, Geri Halliwell, Melanie Brown y Emma Bunton y formaron la banda Touch. Aquel primer intento fracasó, las cinco jóvenes optaron por cambiar de manager y empezaron a trabajar con Simon Fuller. El grupo se rebautizó como Spice Girls. El 7 de julio de 1996 lanzaron en el Reino Unido su tema Wannabe y el resto es historia. “Cada una de nosotras había luchado a su manera. Y creo que elegir a cinco chicas muy normales, juntarlas y llevarlas de viaje por el mundo fue algo increíble que ninguna se tomó a la ligera”, contó hace poco en W Magazine sobre aquella experiencia.
Cada una de las integrantes representaba un arquetipo y Victoria fue Posh Spice (la Spice pija), un sobrenombre siempre presente en su vida. Las Spice Girls se convirtieron de la noche a la mañana en un fenómeno de masas. Mientras, un joven llamado David Beckham empezaba a despuntar jugando al fútbol en el Manchester United. En 1997, se conocieron y el 4 de julio de 1999 se casaron.
Los tabloides británicos encontraron en Posh y Becks, como denominaron a la pareja, su nueva gallina de los huevos de oro. “Cuando la gente supo que habíamos empezado a salir, la intensidad de los paparazis y los medios fue mayor que nunca”, apuntó en W Magazine. Además, vivió uno de los episodios más aterradores de su vida cuando supo de un complot para secuestrarla. Scotland Yard detuvo en 2002 a nueve personas implicadas.
Persona distante
Para resguardarse de ese lado oscuro de la fama se construyó una fachada de persona distante, una respuesta a la atención exacerbada que despertaba su persona, criticada por tener pocas curvas o tener demasiadas, y culpabilizada cuando su marido tenía un mal día en el terreno de juego.
El matrimonio tuvo a su primer hijo, Brooklyn, en marzo de 1999. En 2000, las Spice Girls formalizaron su separación y Victoria Beckham trató de lanzar su carrera en solitario, aparcada de forma definitiva tras la fría acogida de su único álbum de estudio. Fue entonces cuando dejó en un segundo plano la música para centrarse en su familia (después de Brooklyn, llegaron Romeo, que ahora tiene 21 años, Cruz, 19, y Harper Seven, 12). De 2003 a 2007 los Beckham vivieron en Madrid y David triunfó en el Real Madrid. Fue en España donde Victoria comenzó a fraguar la idea de crear su marca de moda.
En 2008 vio materializado su sueño. Después de 14 años, la compañía logró beneficios por primera vez hace solo unos meses. El diario Financial Times afirma que los ingresos de la compañía VBHL (Victoria Beckham Holding Limited) crecieron un 44%, hasta los 58,8 millones de libras en 2022 frente a los 40,9 millones de 2021. En 2019, amplió su negocio con la creación de Victoria Beckham Beauty, una división de belleza que funciona como una marca independiente y que ha tenido muy buena acogida.
A sus 50 años, ejerce pleno control sobre su imagen. Hace tiempo que dejó de importarle lo que publicara la prensa y utiliza las redes sociales con gran asiduidad para mostrarse como es o, al menos, como quiere ella ser percibida: “Tan pronto como pude comunicarme a través de las redes sociales, la gente pudo ver mi auténtica personalidad”. En un mensaje compartido ayer en su cuenta de Instagram en el que reflexionaba sobre su cumpleaños, escribió: “Este es el comienzo de un nuevo y emocionante capítulo y yo apenas estoy empezando”.