02 Dorich House Londres
Desconocida incluso para londinenses avezados, uno de los secretos mejor guardados de la capital británica es la casa-museo de la escultora y pintora Dora Gordine, de ascendencia judía y nacida en 1895 en Letonia. Está a un salto de ciervo del parque Richmond, en el suroeste de Londres. Ella la proyectó como casa, estudio y galería de sus obras en 1936 y vivió allí con su marido, Richard Hare, un estudioso de la cultura rusa. Por fuera parece un extraño castillo de ladrillo rojo. Por dentro, sus amplias claraboyas, sus ventanas semicirculares y sus espacios diáfanos muestran la voluntad de una artista total que construyó su hogar sin concesiones a lo convencional y siendo muy consciente de sus prioritarias necesidades profesionales. Los dos primeros pisos sirvieron como estudio para el modelado, el trabajo en yeso y la exposición de obras ya terminadas. El tercero, al que se llega por unas estrechas escaleras, acogía la vivienda propiamente dicha, luminosa, no muy grande, con su colección y llena de arte ruso. Si hace buen tiempo, la azotea descubierta ofrece vistas fabulosas del jardín y del parque Richmond, con sus ciervos y los recuerdos de otra vecina ilustre, la escritora Virginia Woolf. Tras la muerte de Gordine en 1991, la Universidad de Kingston transformó la casa en un museo dedicado a su memoria y enfocado a promocionar y difundir el trabajo de otras creadoras. Entrada: 5,50 euros.