Sin recursos y excluidos
Casi tres millones de niños y niñas viven en situación de pobreza infantil en nuestro país. Ante esta realidad, los empleados de GSK España realizan acciones con el fin de recaudar fondos destinados al programa desarrollado por Save the Children para luchar contra este problema. El programa atiende cada año a 8.000 niños y niñas en riesgo de exclusión social a través de cuatro ámbitos: refuerzo educativo, ocio y tiempo libre, atención psicosocial a familias y niños y ayuda material. “El refuerzo educativo es nuestro programa principal”, dice Raúl Arnaiz. “La educación es la herramienta más importante para romper el círculo de transmisión generacional de la pobreza, de ahí que concentremos esfuerzos para que estos niños no abandonen la escuela y tengan las mismas condiciones y oportunidades que otros. Trabajamos en centros propios y con más de 50 colegios en toda España que nos ceden sus instalaciones, facilitando clases de apoyo, actividades extraescolares, libros y material escolar, así como vías que sirvan para romper la exclusión tecnológica de estos niños”, añade Arnaiz. El ocio es otra de las ramas más importantes de las que se ocupa el programa. “Cualquier niño tiene que ejercer su derecho al juego. Además, es una herramienta esencial para transmitir valores como el compañerismo, la tolerancia o el respeto y para detectar conductas, comportamientos, inseguridades, etcétera”, asegura Arnaiz.