Los Gobiernos español y mexicano buscan superar el malestar por la carta al Rey
La responsable de España Global y López Obrador comparecen hoy en un acto conjunto
México y España buscan normalizar la relación tras la polémica por la carta en la que el presidente Andrés Manuel López Obrador exigía al Rey que se disculpase por los abusos cometidos durante la conquista. Con la conmemoración de la llegada a México de parte del exilio republicano español —hace 80 años— como telón de fondo, ambos Gobiernos tratan hoy de escenificar una concordia que quedó rota con esa rotunda reclamación del líder mexicano. Pese a todo, el temor a un nuevo choque a cuenta del papel de Hernán Cortés en el país norteamericano no se ha disipado.
La secretaria de Estado de la España Global, Irene Lozano, inició ayer una visita oficial de varios días. Se trata del primer viaje de un representante del Gobierno español a México desde la exigencia de disculpas que verbalizó López Obrador a finales de marzo. Lozano participará hoy en la mañanera, la rueda de prensa que todos los días da López Obrador a las siete de la mañana y que, en muchas ocasiones, va precedida de un acto con invitados. La secretaria de Estado evitará referirse a esta polémica, aunque sí aludirá a la historia compartida entre los dos países, explican fuentes de su entorno. La responsable de esta cartera, cuyo principal cometido es mejorar la reputación de España en el exterior, ya avanzó ayer en Twitter alguna de estas líneas. “España no se entiende sin México y México no se entiende sin España”, aseguró en la red social.
Ambos países son conscientes de que las relaciones bilaterales no se pueden enconar más y han encontrado en esta conmemoración la mejor forma de limar asperezas en público tras la polémica suscitada por la carta al Rey. La iniciativa de participar en la mañanera surgió de la Presidencia mexicana. Para el Gobierno de López Obrador, de tintes izquierdistas en lo ideológico, celebrar la República española es algo con lo que sus integrantes se sienten muy cómodos. Además, desde el Ejecutivo mexicano se ha insistido en las últimas semanas en trasladar el mensaje de que la carta ya es algo pasado y que López Obrador no va a volver a incidir en ello. El Gobierno español ya dejó claro que no tenía intención de ceder a la petición del mandatario mexicano. Aun así, los representantes españoles no terminan de convencerse, pues sienten que en el momento en que el presidente necesite recurrir a algo que le genera rédito en su país, lo hará.
El formato de esa comparecencia entre representantes españoles y mexicanos es aún una incógnita. Junto a Lozano estarán el presidente del Ateneo de España,
Ernesto Casanovas, y Fernando Rodríguez Miaja, superviviente del exilio, que recibirá un homenaje por parte de López Obrador. También intervendrá el secretario (ministro) de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, que posteriormente viajará a Veracruz, donde se celebrará otro acto de conmemoración con decenas de exiliados españoles que vinieron en diversos barcos tras la llegada del Sinaia, el primero que arribó a México, y en el que se descubrirá una placa de agradecimiento al mandatario Lázaro Cárdenas.
Está previsto que las palabras de agradecimiento hacia México, al menos por parte de los exiliados, tengan como destinatario principal a Lázaro Cárdenas, quien favoreció el asilo a los refugiados republicanos. Fuentes del Gobierno de López Obrador confirmaron que se está estudiando también que, del lado mexicano, bien el presidente o el canciller agradezcan la aportación de los exiliados republicanos al devenir del país.