EH Bildu y el PSOE pugnan por el voto de Podemos y Sumar en la recta final
Otegi pide el voto para romper la hegemonía del PNV y los socialistas se reivindican como “la izquierda de verdad” El 8% que logró en 2020 el partido de Belarra es el pastel más codiciado
EH Bildu dice estar viviendo “un sueño” que espera hacer realidad ganando por primera vez unas elecciones vascas el próximo domingo, 21 de abril. Es el partido que más pujanza ha mostrado en los últimos procesos electorales y uno de los favoritos, según las encuestas, para ser ahora la fuerza más votada y superar al PNV, algo que no ha ocurrido en 40 años. “La izquierda independentista está en disposición de ganar las elecciones vascas. Eso ya es un triunfo en sí mismo”, clamó ayer Arnaldo Otegi en el mitin más concurrido de su partido en lo que va de campaña. El candidato, Pello Otxandiano, aseguró que está “dispuesto a liderar el país”. Y en ese objetivo EH Bildu aspira a concentrar el voto de toda la izquierda, particularmente el del espacio a la izquierda del PSOE que ahora cuenta con seis diputados pero al que las encuestas sitúan a la baja. En ese anhelo la izquierda independentista competirá con el PSE-PSOE, que ha hizo ayer el mismo llamamiento al voto útil de la izquierda. Socialistas y abertzales se disputan así abiertamente al electorado de Podemos y Sumar.
En el fin de semana central de la campaña, los líderes nacionales aprovecharon para pisar de nuevo la arena electoral vasca: Pedro Sánchez (PSOE), Yolanda Díaz (Sumar), Irene Montero (Podemos) y Santiago Abascal (Vox) participaron en los mítines de ayer; hoy domingo lo hará Núñez Feijóo (PP). El PNV ha decidido entrar al choque con los independentistas después de una semana de guante blanco.
Los partidos encaran la recta final con la obsesión de amarrar a su electorado y pescar en otros caladeros. EH Bildu y el PSE-PSOE miran en la misma dirección: quieren cortejar a los votantes de la izquierda confederal que representan Podemos Alianza Verde y Sumar. En mítines que se celebraban al mismo tiempo (los socialistas en San Sebastián y los abertzales en Tolosa, a 25 kilómetros), unos y otros han echado la caña a ese mundo, sin disimulo. Eneko Andueza, el aspirante del PSE, reivindicó ante los suyos el valor de las siglas socialistas: “Somos la izquierda útil de verdad. Somos el voto de la seguridad, de la estabilidad, que sabe gobernar y lo hace bien, el voto seguro. No somos un proyecto efímero frente a los que se pasan la vida en peleas internas y con los que el voto se pierde”, ha dicho refiriéndose a Podemos y Sumar. Pedro Sánchez, que cerró ese acto político, se dirigió expresamente a todos aquellos votantes que el pasado 23 de julio dieron la victoria a los socialistas en Euskadi, una marca que no conseguía en unas generales desde 2008, para que “concentren” el voto en la candidatura de Andueza.
Podemos recibió el 8% de los sufragios en 2020 (fue la cuarta fuerza parlamentaria, con seis escaños). Ese es el trozo de pastel más codiciado por el resto de los partidos de izquierdas. El partido de Ione Belarra y la plataforma Sumar, de Yolanda Díaz, concurren esta vez separados y las encuestas apuntan a que podrían quedarse fuera del Parlamento. En estos partidos puso ayer el foco Otegi: “Desde el mayor de los respetos y de los cariños, queremos decir a las gentes que votan a esa izquierda confederal que hoy en Euskal Herria solo hay una izquierda que suma y puede ganar. Y se llama EH Bildu”, afirmó. Les pidió el voto “por responsabilidad política” y con la finalidad de provocar un cambio en la correlación de fuerzas que permita romper la hegemonía del PNV.
Una fuga masiva de votos hacia EH Bildu o el PSE supondría vaciar el casillero de Podemos y abocar a esta formación y a Sumar a la insignificancia política. Ione Belarra se resiste a ello y ayer pidió el apoyo para su candidata, Miren Gorrotxategi: “Solo hay un voto, el de Podemos, que garantiza un Gobierno y una mayoría de izquierdas, porque todos los demás van a la bolsa del PNV”, ha dicho en alusión a los votantes socialistas. Yolanda Díaz, vicepresidente segunda y ministra de Trabajo, quiere que el electorado de Sumar se movilice para poner “fin” en Euskadi al “modelo agotado” del PNV y el PSE-EE.
El PP vasco guarda para este domingo el acto central en Bilbao, al que asistirá Alberto Núñez Feijóo. Sánchez ya le dejó un recado la víspera: “Ni mil paladas de lodo de Feijóo y Abascal van a tapar los éxitos de España”, dijo en el mitin socialista. La campaña de Vox discurre por otra vía y entre grandes medidas de seguridad y mucha presencia de la Ertzaintza, como en el acto que celebraron ayer en Getxo (Bizkaia), donde los asistentes fueron recibidos con gritos y silbidos y con pancartas en contra de la extrema derecha. La policía vasca detuvo a una persona por atentado contra un agente de la autoridad una vez concluido el mitin.
Mientras, los dos principales aspirantes a la victoria, Imanol Pradales (PNV) y Pello Otxandiano (EH Bildu), se dedican a confrontar sus programas en su lucha por llegar a Ajuria Enea. Otxandiano reprochó a Prada
les que el PNV defiende “un modelo partidista”, frente al “modelo de país” de los soberanistas. El peneuvista replicó que EH Bildu se caracteriza por practicar “la política del no a todo”. “Lo más grave es que en los tiempos más difíciles de este país nunca han arrimado el hombro. No os dejéis embaucar. Son los mismos de siempre, les vamos a tener en contra, como siempre. Pero la sociedad vasca tiene memoria. Nosotros a lo nuestro, que es el progreso y el bienestar”, incidió Pradales en un mitin en Getxo (Bizkaia).
Lo que más preocupa al PNV es que la ciudadanía se quede en casa el 21-A. A menor participación, las posibilidades de su partido se reducen, según reconocen en las filas peneuvistas. Tiene que votar todo el mundo, dijo su presidente, Andoni Ortuzar, ayer. Mientras, en el bando contrario se respira “alegría y tranquilidad”. Otegi aprovechó su discurso para citar una frase de Will Smith en la película Hitch: “La vida no se mide por las veces que respiras, sino por los momentos que te dejan sin aliento”. Y él remata con la siguiente: “Algo así puede ocurrir el 21 de abril. No sé cuándo, pero Pello Otxandiano será lehendakari”.