El Pais (Galicia) (ABC)

Sánchez gana perfil internacio­nal con su defensa de Palestina en pleno ciclo electoral

Israel guarda silencio ante el activismo del presidente, que aglutina a los países europeos que quieren reconocer al Estado palestino

- MIGUEL GONZÁLEZ Madrid

Una veintena de personas, con banderas españolas y palestinas, vitorearon el viernes a Pedro Sánchez a su llegada a la sede del Gobierno en Oslo. Fue un hecho anecdótico, pero que sería insólito en suelo español, donde el presidente no suele tropezarse con manifestac­iones de apoyo sino más bien al contrario. El primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, le agradeció que haya hecho una apuesta clara por el reconocimi­ento del Estado palestino y se dedique a recorrer Europa buscando adhesiones. El Parlamento noruego instó en noviembre pasado a Støre a reconocer a Palestina como Estado y este se declaró el viernes “listo” para hacerlo. No se comprometi­ó a dar ese paso a la vez que España, pero tampoco lo descartó.

“Cuando todo esto quede atrás, la historia juzgará severament­e a quienes no hicieron lo que estaba en su mano por evitarlo”, reflexiona un alto cargo de La Moncloa. “La tragedia que se desarrolla ante nuestros ojos en Gaza está generando un profundo malestar en las sociedades europeas y una sensación de impotencia”, coincide un experto. El reconocimi­ento del Estado palestino, más allá de su eficacia práctica, es la válvula que han encontrado muchos gobiernos, sobre todo de países medianos y pequeños, para dar satisfacci­ón a sus opiniones públicas. “Muchos quieren hacer algo, pero no desean hacerlo solos para no significar­se”, agregan en La Moncloa. Sánchez ha visto la oportunida­d y ha decidido asumir el protagonis­mo. De momento, se ha convertido en coordinado­r de los países dispuestos a reconocer a Palestina como Estado que están evaluando cuándo y cómo dar ese paso.

Tras su escala en Oslo, el presidente español aterrizó en Dublín (Irlanda), donde el nuevo taoiseach (primer ministro), Simon Harris, le confirmó que asume el compromiso de su antecesor, quien firmó el 22 de marzo una declaració­n conjunta con España, Eslovenia y Malta en la que se mostraba dispuesto a reconocer al Estado palestino en el momento oportuno. “Parece que estamos cada vez más cerca [de ese momento] y queremos avanzar de la mano con España, con cuantos más aliados mejor”, apostilló.

En plena campaña de las elecciones autonómica­s vascas y a menos de un mes para las catalanas y de dos para las europeas, Sánchez dedica buena parte de sus esfuerzos a aglutinar una masa crítica de países para que el reconocimi­ento de Palestina sea un hecho relevante y no un gesto aislado, como le pasó a Suecia en 2014. El lunes recibirá en La Moncloa al nuevo primer ministro portugués, Luis Montenegro, quien ya ha adelantado que “ve con buenos ojos” el ingreso de Palestina en la ONU; el martes viajará a Eslovenia, para concretar su compromiso del 22 de marzo; y el miércoles, en los aledaños del Consejo Europeo, se reunirá con sus homólogos de Luxemburgo y Bélgica, que ostenta la presidenci­a de turno de la Unión Europea. Con el primer ministro belga, Alexander de Croo, con quien viajó en noviembre a Oriente Próximo, tiene “plena sintonía”, según La Moncloa, pero este aún no se ha sumado a la iniciativa por la heterogene­idad de su Gobierno y porque tiene elecciones generales en junio.

Tras llamar a consultas a su embajadora en Madrid en noviembre pasado, ahora Israel guarda silencio ante el activismo de Sánchez. En Estados Unidos, el Departamen­to de Estado ha subrayado que el reconocimi­ento del Estado palestino debe ser resultado de un acuerdo con Israel, pero también reconoce que es una competenci­a soberana de los Estados decidir cuándo y cómo reconocen a otro. Fuentes diplomátic­as aseguran que Washington ha trasladado a Madrid que no boicoteará su iniciativa; es decir, que no presionará a los países que se sumen a ella para que no lo hagan.

El hecho de que Sánchez se dedique a la política internacio­nal en pleno ciclo electoral no significa que no esté pendiente de las urnas. Al contrario. En La Moncloa destacan que, aunque el mandatario español preside la

Internacio­nal Socialista, los gobiernos que apoyan el reconocimi­ento del Estado palestino pertenecen a distintas familias políticas: democristi­ana (Irlanda), socialdemó­crata (Noruega) o liberal (Eslovenia). “Es un tema trasversal, que en España tiene el apoyo mayoritari­o del electorado, incluido el del PP”, subrayan. Esto es, según interpreta­n fuentes del Gobierno, lo que ha descolocad­o al PP: que Sánchez lidere una iniciativa que apoyan conservado­res europeos y sus propios votantes. Alberto Núñez Feijóo la ha criticado con la boca pequeña, reclamando que España espere a que la apoyen países “de peso”; mientras que el expresiden­te José María Aznar ha calificado de “absurdo” reconocer a un Estado palestino “que no existe” y Díaz Ayuso ha acusado al presidente de “premiar” a Hamás. “Que se aclaren”, ha zanjado Pedro Sánchez.

La pugna diplomátic­a se libra en varios escenarios. El día 18 se debatirá en el Consejo de Seguridad

Washington no boicoteará la iniciativa, según fuentes diplomátic­as

El dirigente socialista pide a los líderes del PP “que se aclaren” con su posición

el ingreso de Palestina como miembro de pleno derecho de la ONU y, aunque la solicitud sigue pendiente del comité de admisión, Argelia ya ha anunciado que pondrá su propia propuesta a votación. Si EE UU, como es previsible, la veta, los países árabes llevarán el asunto a la Asamblea General, advierten los expertos, y en ese foro todos los países europeos, los que se han unido a España y los que no, tendrán que retratarse públicamen­te. Salvo que un ataque de represalia de Irán contra Israel haga saltar todo por los aires y la guerra entre en una nueva fase.

 ?? JAVIER HERNÁNDEZ ?? Pedro Sánchez, con el candidato socialista a lehendakar­i, Eneko Andueza, a su lado, ayer en San Sebastián.
JAVIER HERNÁNDEZ Pedro Sánchez, con el candidato socialista a lehendakar­i, Eneko Andueza, a su lado, ayer en San Sebastián.

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