La vía china para lograr un visado de oro
España dio 2.712 permisos de residencia por inversiones inmobiliarias a estos ciudadanos entre 2013 y 2023. Son los mayores beneficiados, seguidos de los rusos
España dice adiós a los visados de oro. En la última década ha concedido 14.576 golden visa o permisos de residencia a ciudadanos extracomunitarios que han invertido como mínimo 500.000 euros en la compra de vivienda, sin contar las cargas y las hipotecas. El Gobierno va a eliminarlos porque considera que estos visados ligados a inversiones inmobiliarias han tensionado el mercado y han contribuido al incremento de los precios y la especulación, algo que cuestionan las empresas del sector.
Los inversores chinos, seguidos de los rusos, son los que más se han beneficiado de este permiso de residencia exprés desde que se puso en marcha en 2013, con el Gobierno del PP. En total, 2.712 inversores de esta nacionalidad lo han conseguido hasta 2023, según Transparencia Internacional. Madrid, Barcelona, Málaga, Alicante, Baleares y Valencia han concentrado el 90% de todas las autorizaciones.
Hace dos semanas, Diego Vázquez, consejero delegado de la inmobiliaria Mr. House, cerraba la última operación vinculada a una golden visa por parte de un inversor chino, “un industrial que tiene una fábrica de pilas en su país y quiere montar un almacén en España”. Ha comprado un chalé en Boadilla del Monte (Madrid) por 975.000 euros para residir con su familia. Vázquez cuenta el caso de otro inversor que ha adquirido dos viviendas en Parla (Madrid) valoradas en 300.000 euros para alquilar por 750 euros al mes y una tercera para residir por otros 300.000 euros, con lo que supera el límite exigido. “Quería una casa cerca de sus negocios”. De los dos centenares de viviendas que vende esta agencia cada año a ciudadanos chinos, el 5% está vinculado a una golden visa, un trámite que externalizan. Aquí trabajan tres comerciales asiáticos, algo fundamental para salvar la barrera del idioma y dar confianza a estos clientes, que son recogidos en el aeropuerto e invitados a una corrida de toros o a un partido de fútbol.
Quienes piden el visado de oro por inversiones inmobiliarias suelen ser empresarios. “Buscan establecerse para implementar sus negocios, vender producto chino en Europa de manera legal, sacar capital del país para reducir riesgos ante eventuales contingencias económicas y obtener el visado Schengen que les facilite la movilidad; todo son ventajas”, dice Jorge Martín, socio del despacho de abogados español BGILAW. En su opinión, la supresión tendrá un impacto negativo en la inversión, aunque “el empresario que quiere invertir aquí lo va a seguir haciendo. La golden visa facilitaba mucho las cosas; ahora será un poco más complejo”.
Eduardo Cires, socio de Inmobiliaria Liberty Barcelona, agencia especializada en la comunidad china en Cataluña, cuenta cómo se realizan las inversiones: “La venta de un piso en Pekín o Shanghái aporta fácilmente una liquidez de un millón de euros, con el que adquieren un piso grande o ático en el centro de Barcelona o una casa con jardín en localidades de costa como Sitges. Adicionalmente, suelen invertir en la compra de locales comerciales para alquilarlos”.
Las inmobiliarias no creen que eliminar estos permisos vaya a solucionar el problema de la vivienda. “Hacen mucho ruido porque son una tarjeta de residencia para ricos, pero no van a tener la repercusión esperada”, advierte Jesús Xu Chen, director de operaciones de Bafre Inmobiliaria, con oficinas en Madrid, Pekín y Shanghái.
El cliente que busca inversiones a través de esta agencia para obtener el visado suele comprar tres pisos que cuestan entre 180.000 y 200.000 euros cada uno. “Los ponen en alquiler y pagan al contado”, dice Xu Chen. “Gastan lo mínimo, no tienen nada que ver con el latinoamericano”.
En el despacho legal Carbray International, sin embargo, gestionan estos permisos para un inversor con mayor poder adquisitivo. “Compra viviendas de lujo por varios millones de euros y algunos, incluso, piden hipoteca para no descapitalizarse”, indica Lorenia Aquino, directora de negocio y ventas de la firma. En los últimos años, Málaga está en su punto de mira, además de Madrid, Marbella y Barcelona. Este inversor busca viviendas grandes para traer a toda la familia y, de hecho, algunos se decantan por la exclusiva urbanización de La Finca, en Pozuelo de Alarcón (Madrid). En la firma de lujo Engel & Völkers, los inversores chinos que solicitaron golden visa se concentraron en Barcelona. “El tipo de vivienda que compraron fue un piso en el barrio de Eixample de unos 120 metros y tres habitaciones a un precio medio de 668.000 euros”. El 2% de las operaciones de esta agencia en 2023 fue con visado dorado y la mayoría provenían de China, Rusia e Irán.
Crisis de 2008
El Gobierno ha iniciado esta semana los trámites para eliminar las golden visa, que se aprobaron con el objetivo de atraer capital extranjero a España y mitigar los efectos de la Gran Recesión de 2008. Desde entonces, los extranjeros no residentes en la Unión Europea debían hacer una inversión significativa para obtenerla: en inmuebles, en activos financieros o con un proyecto empresarial. Alrededor del 94% de los visados estaban vinculados a inversiones inmobiliarias. De ahí que el Gobierno solo descarte, a priori, estas últimas. España sigue así el camino de otros países como Portugal, Irlanda o Países Bajos, que ya han eliminado el mecanismo tras los reiterados avisos de Bruselas, que considera que constituyen una vía fácil para blanquear dinero negro.
La luz de alarma se ha encendido en España porque en los últimos dos años se han duplicado estas golden visa por inversiones inmobiliarias. En 2022 se concedieron 2.017 visados, 3.217 en 2023 y en los dos primeros meses de este año ya se han otorgado 424. “En esos dos años se habían concedido un tercio de todos los permisos y se estaba invirtiendo lo más barato, los 500.000 euros, que es el precio que tiene un piso en Madrid para una familia de clase media”, afirmó esta semana en la SER Isabel Rodríguez, ministra de Vivienda, que es consciente de que la medida no soluciona el problema de la vivienda en toda España, pero sí “donde suponen un 7% o un 5% de las compras”. Se refiere a ciudades como Marbella (7,1%), Barcelona (5,3%) y algunos municipios de Baleares, donde llegan al 10%.
Sin embargo, varios despachos de abogados que tramitan golden visa coinciden en que las solicitudes han perdido intensidad por el férreo control en el blanqueo de capitales. “Desde hace algo más de un año notamos un veto por el control en compliance y las concesiones han sido a cuentagotas, sobre todo a ciudadanos de China, Turquía, Irán y Rusia”, explican en Carbray International. “Los bancos no quieren inversión china y es más complicado para ellos realizar ciertas inversiones”, prosigue Martín. El anuncio del Gobierno parece haber tenido las primeras consecuencias: “Estamos detectando un efecto huida”, concluye.
Suelen ser empresarios que quieren establecerse o importar productos
“Ya hemos detectado un efecto huida”, sostiene uno de los abogados consultados