Felipe desmonta al Zalgiris
El Madrid, liderado por la casta de su capitán, rinde al conjunto lituano y se acerca a su objetivo de la cuarta plaza en la Euroliga
Con la casta de Felipe Reyes y Campazzo y la frialdad de Causeur y Thompkins el Madrid resolvió un duelo enrevesado ante el meritorio Zalgiris de Jasikevicius (88-81) y afianzó sus opciones para llegar en posiciones de privilegio al top-8 de la Euroliga.
Estaba en juego la cuarta plaza de la clasificación y con ella el factor cancha en la eliminatoria de cuartos de final. Un premio crucial atendiendo a la historia puesto que desde el curso 20082009, cuando el playoff comenzó a disputarse al mejor de cinco partidos, el balance en 36 cruces es de 28-8 para los equipos con ventaja de pista; 17-3 si se reduce la fotografía al último lustro. Con el triunfo, el 17º en el torneo, los de Laso marcan distancias con un rival directo y se quedan a un palmo de concretar el objetivo frente a Estrella Roja y Brose en las dos últimas jornadas.
En un duelo de colmillos afilados compareció, como siempre, Felipe Reyes. Sin Ayón, lesionado el martes en Valencia, el capitán madridista encadenó ocho puntos entre el minuto 12 y el 14 y construyó el primer estirón serio de la noche (32-24). No se agobió el Zalgiris que, al amparo de su iluminación desde el triple, volteó el marcador. Dos bingos de Milaknis y uno más de White elevaron la contabilidad del conjunto lituano a un 5 de 5 desde el 6,75 frente al 2 de 11 de los locales. Cortó la racha Taylor, pero antes del viaje a los vestuarios llegó el cuarto triple de un febril Milaknis, sexto sin fallo de su equipo (41-44, m. 20). Con el paso de los minutos languideció la puntería lituana y del 6 de 6 de la primera mitad pasó al 2 de 7 en triples de la segunda. Les faltó acierto y depósito a los de Jasikevicius pero, atendiendo a su libro de estilo, pelearon con intrepidez.
En la reanudación fue Campazzo el que se puso el partido por montera y comenzó a erosionar el muro lituano mezclando dinamismo y bravura. Cinco puntos del base argentino y sus asistencias para los triples de Causeur (10 puntos en el tercer cuarto) liberaron al Madrid de unos minutos claustrofóbicos.
Regresó Felipe para rematar la faena, orgulloso y productivo, pero también aparecieron Jankunas y Pangos para declarar el estado de incertidumbre (75-74, m. 35). Momento para aunar pasión y frialdad como entendieron Campazzo y Thompkins. La conexión entre ambos acercó al Madrid al premio y un triple certero de Rudy ejerció de descabello y cerró la contienda.