Cristiano llora pero la Juve gana
El Valencia es zarandeado por un equipo que jugó una hora con 10 por la roja al luso
La Juventus sometió al Valencia en Mestalla y le dio un revolcón en su vuelta a Europa. En un partido muy desequilibrado, los italianos ganaron 0-2 y zarandearon el frágil sistema defensivo local, que sigue en obras. Percutiendo especialmente por el endeble costado derecho valencianista, los bianconeros, que no acusaron la expulsión de Cristiano Ronaldo en la primera mitad, exhibieron currículum, poso y desnudaron todas las vergüenzas del Valencia que viaja cuesta abajo en un descorazonador arranque de temporada. La distancia entre ambos equipos fue abismal. La Juve, muy superior, no hizo prisioneros. El partido fue siempre suyo.
Marcelino, asomado desde el empate del domingo ante el Betis al cráter abierto en su corredor central, movió su once inicial buscando la fortaleza defensiva que ha perdido en un dubitativo arranque de liga. Garay y Kondogbia son bajas notables. Daniel Wass, que fichó por el Valencia para jugar Liga de Campeones, volvió a acompañar a Parejo. En el lateral derecho jugó Vezo para taponar a Cristiano Ronaldo y arriba mezclaron Batshuayi y Rodrigo por primera vez en la temporada. Gonçalo Guedes, que sigue sin alcanzar su punto óptimo de forma, también debutó de inicio. Su partido fue intrascendente. El primer tiro a puerta fue suyo pero taponó Chiellini.
Diez minutos le costó a la Juve asomarse al área del Valencia y generar, a partir de ese momento, un chaparrón de ocasiones claras de gol aprovechando los desajustes defensivos del Valencia. Bernardeschi, que entraba por la izquierda, apareció en cambio por la derecha, superó a Vezo y centró al área donde Cristiano erró en el remate y asistió sin querer a Mandzukic, que envió el balón por encima de la portería. Seis minutos más tarde rompió Cristiano el costado derecho local, Bernadeschi recogió el centro y pasó sobre Khedira que, solo ante Neto, envió el balón fuera. Minutos más tarde el alemán se marchó roto. La tercera ocasión bianconera la salvó Murillo con el pecho después de una salida poco afortunada de Neto. Otra vez desde el lado derecho,
Cristiano centró otra pelota que desaprovechó Bernadeschi en boca de gol.
La grada, helada ante la tromba atacante de la Juve y la dosis de fortuna que había tenido su equipo, atronó con la expulsión de Cristiano Ronaldo por presunta agresión a Murillo. El árbitro asistente denunció con vehemencia el golpe del siete juventino, que se marchó llorando.
El partido pareció cambiar. El Valencia se quedó la pelota y mientras la Juve digería la expulsión de Cristiano, Batshuayi bailó con Bonucci y lo dejó sentado con un regate de fútbol sala. Su disparó impactó en el pecho del meta Szczcesny.
El primer golpe
El mazazo llegó acto seguido. Matuidi centró al área, Cancelo recogió el rechace, recortó sobre Parejo y estrelló la pelota en el travesaño. El ex del Valencia buscó el balón, que salió escupido por el travesaño, pero Parejo le golpeó la cara en una acción tan peligrosa como tonta e innecesaria y provocó un penalti que transformó Pjanic. La jugada partió, otra vez, desde la zona que defiende Vezo. La banda derecha del Valencia sigue sangrando. Con Piccini o con Vezo, la herida es la misma por la que sangraba el equipo de Marcelino el curso pasado. Hasta en cuatro ocasiones martilleó desde allí el equipo italiano.
La segunda parte se abrió con un esperanzador cabezazo de Rodrigo que detuvo Szczcesny cómodamente, pero el segundo golpe de la Juventus no se hizo esperar. Cancelo, insultantemente superior en carrera, echó a correr, dejó atrás a Parejo y a Guedes y rascó un córner. En la defensa de la siguiente jugada, Murillo placó a Chiellini y el árbitro señaló un nuevo penalti. Pjanic volvió a marcar y mató el partido.
A partir de ahí, el Valencia, con Carlos Soler en el centro junto a Parejo, Wass en el lateral derecho —para cerrar el agujero— y Cheryshev en la izquierda, se acercó al área juventina pero se marchó de vacío y sin gol. La Juve ya se había limitado a defender. En el descuento el árbitro señaló penalti sobre Gabriel, pero Parejo, para acabar de ensuciar el regreso a la Champions, falló enviando el balón sobre el meta visitante.