La candidatura de Junqueras a las europeas descoloca a Puigdemont
En menos de 10 días el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont y su entorno han tenido que encajar dos severos golpes por parte de Esquerra Republicana, su antiguo socio de Gobierno y contendiente en la lucha por la hegemonía dentro del independentismo. Primero, la decisión de que Ernest Maragall encabece la candidatura republicana para la alcaldía de Barcelona. Y, ayer, ERC explicó que su líder, Oriol Junqueras, procesado por rebelión y malversación y en prisión preventiva desde hace 331 días, será el candidato para las próximas elecciones europeas. Mientras no haya una condena contra él, Junqueras puede concurrir a los comicios aunque sea desde la cárcel.
El líder in pectore de ERC y vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, visitó ayer la prisión de Lledoners, donde está Junqueras, y leyó una carta en la que el político preso se postula para encabezar la lista republicana a las elecciones europeas que se celebrarán en mayo de 2019. En la misiva, el exvicepresident aseguró que ser candidato es “la mejor manera de no hacer efectiva la represión que nos quieren imponer” e internacionalizar las demandas del independentismo catalán.
Retraso en la Crida
El ofrecimiento de Junqueras llega justamente dos días después de que la Crida Nacional per la República —el movimiento panindependentista que promueve Puigdemont— anunciara que retrasa su fundación y pospone aún más su decisión sobre si presentarse o no tanto a las elecciones municipales como a las europeas. El principal escollo son las resistencias de una parte del PDeCAT a fundirse dentro de la Crida.
Fuentes de la dirección de los republicanos aceptan que el partido ha querido pasar a la ofensiva y plantar cara a Puigdemont y su entorno, a los que acusan de pensar solo en clave electoral. La decisión de poner a Junqueras al frente de la candidatura también juega con el tempo del juicio contra el procés. Junqueras tiene de momento sus derechos electorales intactos, pero la Fiscalía seguramente pedirá su inhabilitación para ejercer cargos públicos.
El líder en prisión dice que su candidatura ayuda a “internacionalizar la causa de la libertad de Cataluña, y denunciar que la causa general contra el independentismo se ha convertido en una causa general contra la democracia”. Y añade: “Mostrar a Europa las debilidades y las vergüenzas del reino español es hoy más importante que nunca”.