Los leones lo hacen hasta 40 veces al día
La vida sexual de los animales, una de las cosas que nos provoca curiosidad y nos fascina de ellos, es uno de los temas que suelen estar presentes en los libros del género. Montgomery, por ejemplo, escribe páginas sorprendentes sobre la cópula del pulpo y Hoare presencia (y nos cuenta) escenas de tribadismo entre delfines hembras. Uno de los libros recientes más explícitos sobre el asunto y que incluye multitud de ilustraciones a las que el lector se asoma como un Linneo voyerista es paradójicamente (o no) una obra para público juvenil (“a partir de ocho años y para todas las edades”), La vida amorosa de los animales (Takatuka, hay versión en catalán), de la pedagoga sexual alemana Katharina von der Gathen, con dibujos de Anke Kuhl. Repasa pormenorizadamente la forma de hacerlo de los animales, las características a menudo asombrosas de sus órganos sexuales, e incluso la frecuencia de paso: leones, hasta 40 veces al día; pandas, una vez al año; anguilas, una vez en la vida, vaya; bonobos, continuamente (aunque solo cinco segundos cada vez, mientras que el acto sexual del topo puede durar 40 horas, y sin conversación). ¿Sabían que las mariquitas machos tienen el pene provisto de un garfio, que los osos se masturban y que los murciélagos toman a las hembras cabeza abajo y mientras ellas están dormidas hibernando? Asombroso mundo…