El presidente amenaza con un bloqueo de la Administración si no se aprueba el muro
El republicano mantiene un rifirrafe con líderes demócratas sobre la frontera con México
A modo de telerrealidad, el presidente de EE UU y los líderes demócratas en el Congreso mantuvieron ayer, en el Despacho Oval y ante las cámaras de televisión, un acalorado rifirrafe sobre el polémico muro que el republicano quiere construir en la frontera con México para combatir la inmigración ilegal. Donald Trump acabó amenazando a la oposición con provocar el cierre de la Administración federal —al bloquear un acuerdo de financiación en las Cámaras— si no le aprueban una partida para el muro. “Me siento orgulloso de cerrar el Gobierno por seguridad en la frontera porque la gente de este país no quiere delincuentes, hay drogas y gente con muchos problemas entrando en nuestro país, me colgaré la medalla de cerrarlo”, soltó.
Todo ocurrió durante lo que la jerga periodística suele llamar el mudo previo a la reunión entre Trump y el vicepresidente, Mike Pence, por una parte; y los líderes demócratas de la Cámara de Representantes y del Senado, Nancy Pelosi y Chuck Schumer, respectivamente, por otro. Se trata del momento en que los reporteros gráficos toman imágenes de los protagonistas, que charlan de asuntos intrascendentes, pero que Trump ha transformado porque con frecuencia responde a preguntas. Esta vez, el debate previsto a puerta cerrada acabó siendo público con una discusión de 15 minutos.
La cita era para negociar la financiación de la Administración y evitar un bloqueo por falta de recursos. Pelosi trataba de frenar un cruce de reproches ante la prensa, y Trump la retaba: “No es malo Nancy, es transparencia”. El republicano empezó a incomodarse cuando Pelosi dijo: “Los estadounidenses saben que debemos mantener el Gobierno abierto, que un cierre no vale la pena por nada y no deberíamos tener un cierre de Trump”. “¿Un qué?”, interrumpió
el aludido. Y comenzó el fuego cruzado.
Trump quiere utilizar estas conversaciones para lograr de los legisladores una partida para el muro. Asegura que México pagará al final la obra, pero reclama 5.000 millones de dólares para empezarla. Schumer le atizó al recordar los “Pinochos”, un sistema de puntuación de The Washington Post para medir las mayores mentiras o inexactitudes de Trump, y en el que el muro ocupa un destacado lugar por las veces que ha dicho que se ha empezado. El demócrata también le acusó de haber amenazado 20 veces con cerrar el Gobierno. Es entonces cuando Trump repitió la amenaza. Al acabar la reunión (ya a puerta cerrada), la Casa Blanca afirmó que había resultado un “diálogo constructivo”.