Íñigo López, suspendido dos horas antes del Dépor-Málaga
La Federación aparta al futbolista tras admitir un arreglo
Después de las detenciones de la Operación Oikos el pasado martes 28 de mayo, el primer castigo llegó ayer por la vía administrativa. El Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) suspendió provisionalmente a Íñigo López apenas dos horas antes de que su equipo, el Deportivo de La Coruña, recibiera ayer en Riazor al Málaga para el partido de ida de la primera ronda de la promoción de ascenso a Primera que acabó con victoria del equipo gallego 4-2.
El día de ayer en este frente fue frenético. Por la mañana, la RFEF, a través de su departamento de Integridad, solicitó al Comité de Competición la suspensión urgente y excepcional del futbolista, el curso pasado en las filas del Huesca, que había reconocido en una entrevista en El Mundo que se había producido un pacto con el Nàstic para facilitar su victoria el 27 de mayo de 2018 en el partido que desencadenó la Operación Oikos. La federación solicitó estas medidas al apreciar una “gravedad alarmante” en las palabras del futbolista y el “carácter flagrante de su reconocimiento público”.
Poco después de las dos de la tarde se reunió el comité, que nombró juez instructor para el procedimiento. Alrededor de las cuatro, trasladaron el expediente al Dépor y al jugador para que, antes de las cinco, presentaran las alegaciones que consideraran oportunas. El abogado de López, Juan Pablo Lerena, envió un escrito en el que discutía que la medida estuviera justificada. El club mostró “su conformidad con todos los términos de la propuesta”.
Recibidas las comunicaciones, los tres miembros del Comité de Competición tomaron la decisión de suspender provisionalmente a Íñigo López “tras las declaraciones realizadas en relación a los presuntos amaños de partidos y después de que la Real Federación Española de Fútbol solicitara a este organismo medidas cautelares”, se lee en el comunicado oficial.
También ayer por la mañana, LaLiga comunicó que el juez de disciplina de lo social había acordado
“la apertura de una información reservada para discernir la posible responsabilidad de la SD Huesca y del Club Gimnàstic de Tarragona” en el partido entre ambos equipos disputado hace un año en El Alcoraz. Según explica en una nota, el paso del juez es previo a decidir si abre un expediente disciplinario o archiva las actuaciones.
LaLiga entiende que el presunto pacto del Huesca-Nàstic supondría una infracción del artículo 69.2.i) de sus estatutos sociales, que recoge qué se consideran infracciones muy graves: “Las actuaciones dirigidas a predeterminar, determinar o alterar en cualquier tiempo y/o forma, mediante precio, intimidación o simples acuerdos, el resultado de un partido o competición”.