Ribera confía en que Noruega invierta en las renovables en España
La ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, se mostró ayer confiada en que el Fondo de Pensiones de Noruega destine parte de sus inversiones en energía renovable a España al reclamo de los proyectos que se contemplan en el país. El Parlamento noruego aprobó el jueves que el fondo soberano, considerado el más grande del mundo, se desprenda de sus inversiones en compañías de combustibles fósiles y se vuelque en energías renovables. La previsión es que invierta hasta 17.000 millones de euros.
La decisión de Noruega, que ha abierto el interés en todos los países con planes de desarrollo de plantas renovables para un cambio del sistema energético, como es el caso de España, resulta “importantísima” para la ministra. “Salieron del carbón hace tiempo y ahora suman gas y petróleo, y apuestan directamente por las energías renovables; confiemos en que nuestro país tenga capacidad para resultar atractivo y dar seguridad suficiente como para que parte de esa reinversión venga a nuestro territorio”, manifestó a EL PAÍS.
España, que ha presentado en Bruselas el Plan Integral de Energía y Clima, prevé que el 74% de la energía sea renovable en 2030 frente al 38% de la actualidad. Para ello es necesario llevar a cabo fuertes inversiones y desarrollar un sistema de conexiones eficaz que convenza a los grandes inversores internacionales.
Voluntad de cambio
Según Ribera, la resolución del fondo soberano noruego “pone de manifiesto que hay una voluntad clara por parte de los grandes inversores, de los grandes fondos, a medio y largo plazo, de cambiar e integrar razonablemente el riesgo climático en sus decisiones”. Un riesgo que “hasta hace relativamente poco no contaba con una capacidad de análisis que descontara el efecto negativo que podía tener en las cuentas que se habían apostado en proyectos que generan costes y que, probablemente, tengan que asumir cambios de regulación muy importantes si queremos cumplir con lo que todos los gobiernos nos hemos comprometido a hacer en el Acuerdo de París”.
La ministra recordó que la determinación está en línea con lo que ocurre ya con gestores de fondos, como BNP Paribas o Amundi. “Estamos, por tanto, viviendo una transformación importantísima del sistema financiero y de las decisiones de inversión que, esperemos, llegue a buen puerto debidamente ordenada”, concluyó.