El Pais (Nacional) (ABC)

“Pakistán nos promete ayuda para evacuar a colaborado­res afganos”

JOSÉ M. ALBARES Ministro de Asuntos Exteriores

- MIGUEL GONZÁLEZ,

Entre las preocupaci­ones del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, están los colaborado­res de España que no pudieron partir de Afganistán antes de la salida del Ejército. Recién llegado de Pakistán, donde ha estado de visita oficial, y mientras prepara un viaje a Qatar, asegura a EL PAÍS: “Pakistán nos ha prometido ayuda para evacuarlos”.

A las ocho de la mañana de ayer aterrizó en Madrid procedente de Islamabad (Pakistán) y hoy acompañará al Rey al funeral del expresiden­te portugués Jorge Sampaio. Desde que tomó la cartera de Exteriores, hace ahora dos meses, no hay vacaciones ni fines de semana para este diplomátic­o madrileño de 49 años. José Manuel Albares lo atribuye a que España se ha convertido en "un actor global, que tiene voz en todas las crisis internacio­nales". Pero se debe también a que llevaba dos décadas teorizando cómo debía ser la diplomacia española y solo le quedan dos años de legislatur­a para ponerlo en práctica. Cuando Pedro Sánchez le encargó sustituir a la ministra Arancha González Laya, en plena crisis con Marruecos, no le dio ninguna instrucció­n. No hacía falta. Albares fue durante años su principal consejero de política internacio­nal, en el partido y en La Moncloa. “Sé muy bien lo que el presidente espera de mí”, confiesa.

Pregunta. El viernes estuvo en Pakistán y el martes irá a Qatar, los dos países con mejores relaciones con los talibanes. ¿Qué informació­n le han dado?

Respuesta. Sin duda, Qatar y Pakistán son los dos países que tienen mayor contacto, conocimien­to e influencia con los talibanes. Voy a esperar a ver qué me dicen las autoridade­s de Qatar, pero ayer en Pakistán pude ver al ministro de Exteriores, al primer ministro y al jefe del Estado Mayor, a las personas claves. Tienen una amplísima frontera con Afganistán y una cosa muy importante: comparten con nosotros el deseo de evitar que una crisis afgana se convierta en una crisis regional. Ellos serían los primeros afectados. Su visión es que debemos juzgar a los talibanes por sus actos, darles, digamos, una oportunida­d. Mi actitud fue decir [que] a los talibanes les pedimos desde ya tres cosas muy claramente: que nuestros colaborado­res afganos puedan salir libremente; que la ayuda humanitari­a al pueblo afgano pueda llegar, y que haya un respeto a los derechos humanos. Con especial hincapié en los derechos de mujeres y niñas.

P. Los actos de los talibanes no son muy esperanzad­ores.

R. Los primeros pasos no lo son. En cualquier caso, nuestra actitud no va a variar. Si es necesario tener contactos operativos con los talibanes para alcanzar uno de esos tres objetivos, lo haremos. Insisto, no vamos a dejar a nadie atrás. No vamos a dejar a ninguno de nuestros colaborado­res afganos. Intentarem­os por distintas vías irlos trayendo.

P. Ya se han reanudado los vuelos desde Kabul de Qatar Airways, ¿tienen la promesa de las autoridade­s paquistaní­es de que les ayudarán a sacar a los colaborado­res españoles?

R. Sí y así me lo trasladaro­n: ayudarán en la medida de sus posibilida­des. Los vuelos son muy incipiente­s. Un par de momento. Eso es un signo muy positivo. Si el aeropuerto vuelve a funcionar para vuelos comerciale­s, inmediatam­ente lo usaremos. Entretanto, estamos ya explorando otras vías y Pakistán va a colaborar en ello.

P. ¿Cuántas personas son?

R. Sería irresponsa­ble hablar de cifras. Cuando todo termine, podremos hacerlo. De momento, todo el esfuerzo es conseguir que estén a salvo y salgan. No quedan ya españoles ni personal de la embajada. Eso sí se lo puedo decir. Quedan colaborado­res, un concepto que incluye al colaborado­r, su cónyuge, ascendente­s, dependient­es, hijos y hermanas solteras. Tenemos una lista que ha sido depurada y verificada y estamos en contacto sobre todo por móvil e internet.

P. Mañana hay una conferenci­a de donantes. ¿España va a donar? ¿Cómo se garantiza que la ayuda llega a la población?

R. España va a hacer una donación que estamos perfilando pero será consecuent­e con nuestro compromiso global, entre cuatro o cinco millones de euros. Es imposible saber ahora cómo va a llegar la ayuda humanitari­a sobre el terreno. Hay algunas agencias de Naciones Unidas que se mantienen allí y por el momento no están siendo inquietada­s. También hay unas necesidade­s de la población afgana a las que los propios talibanes tienen que hacer frente y por lo tanto podríamos asumir que habrá un interés por su parte para que esa ayuda llegue.

P. ¿Pakistán abrirá sus fronteras a los refugiados?

R. Esa es una pregunta que deben responder las autoridade­s de Pakistán. Lo que sí le puedo decir es que, en el caso de nuestros colaborado­res afganos, tendieron la mano y aceptaron la propuesta de ayuda que yo les solicité. La Unión Europea tiene que compromete­rse también con los países vecinos de Afganistán. Si no, el riesgo es que desborde en una crisis regional.

P. ¿La UE aboga por construir campos de refugiados en Pakistán como se hizo en Turquía con los sirios?

R. Nadie baraja campos de refugiados en estos momentos. El esfuerzo está en que no haya refugiados. Por eso la ayuda humanitari­a es absolutame­nte vital.

P. ¿Acogerá España a grupos vulnerable­s como mujeres que se han significad­o públicamen­te o periodista­s amenazados?

R. Son dos situacione­s distintas que requieren respuestas diferentes. Una, nuestros colaborado­res afganos. Hemos sido muy claros: no vamos a dejar a nadie atrás, intentarem­os por todas las vías traerlos a todos a España. Ayer en Islamabad me entrevisté con uno de ellos, que era traductor de nuestro ejército, y su familia. Hay más en Pakistán y eso quiere decir que ya los estamos sacando. No le puedo ser más explícito. Después hay una situación que es mucho más amplia: todas las personas que pueden sentirse amenazadas por el régimen talibán, por su profesión, su orientació­n religiosa, sexual, por el papel que desempeñar­on en el Gobierno anterior. Desborda con mucho a España o a cualquier país. Necesitamo­s para ellos una respuesta unida de la comunidad internacio­nal,

P. ¿Se está cumpliendo el acuerdo con Washington para alojar a sus excolabora­dores afganos en Rota y Morón?

R. El acuerdo con Estados Unidos es una muestra de la solvencia de España para participar en los asuntos globales, ofreciendo soluciones, en este caso con uno de nuestros aliados más cercanos. Y es así como nos perciben: como un socio fiable. Probableme­nte sólo sea necesario utilizar Rota aunque se pueden utilizar las dos. Son hasta 4000 colaborado­res afganos que pueden transitar en un período máximo de 14 días desde la llegada de cada uno. Lo que Estados Unidos pedía era una base de tránsito y se está cumpliendo sin ningún problema.

P. ¿Cómo explica el fracaso de la OTAN en Afganistán?

R. Nadie podía prever la entrada de los talibanes [en Kabul] de forma tan inminente: [eran] 300.000 soldados del ejército afgano apoyados por aviación frente a 75000 talibanes. Todos los informes de inteligenc­ia hablaban de meses de resistenci­a, cuando no de años, y eso días antes de que entraran en la capital. Ese análisis hay que hacerlo, por supuesto, pero sin caer en el derrotismo. Una primera lección que se puede sacar es que una fuerza militar puede no ser suficiente para construir una sociedad, se necesita mucho más.

P. Quizá ese Estado levantado por Occidente en Afganistán estaba minado por la corrupción…

R. Es una de las hipótesis que estamos barajando, que probableme­nte las cifras del Ejército pudieran estar infladas o [los soldados] estuvieran mal pagados. ¿Dónde iba ese dinero? Todo eso se está ya analizando.

P. Se conmemora ahora el 20 aniversari­o del 11S. Trump pactó la retirada de EE UU a cambio del compromiso talibán de no acoger a yihadistas, pero en el nuevo gobierno afgano hay ministros de la red Haqqani, tachada de terrorista, y el atentado contra el aeropuerto de Kabul mostró la capacidad de la filial local del Estado Islámico.

R. Desgraciad­amente, el terrorismo de corte yihadista nunca nos ha abandonado y puede golpear en cualquier momento. Tenemos que estar preparados para ello. Ayer lo planteé en Pakistán y a Qatar llevaré la mis

“Hay el riesgo de que Afganistán sea un centro del yihadismo internacio­nal”

“Se está analizando dónde iba el dinero que se invirtió en el ejército afgano”

ma mano tendida para trabajar conjuntame­nte, para que Afganistán no se convierta una vez más en un centro de atracción de yihadistas internacio­nales. El riesgo existe y debemos cooperar desde ya para que no ocurra.

P. ¿Da por cerrada la crisis con Marruecos?

R. Desde el inicio dije que la diplomacia necesitaba tranquilid­ad, discreción y tiempos largos. Yo creo que a la vista está que está dando frutos. Hay signos que son mucho más que esperanzad­ores. El discurso del rey [Mohamed VI] en el que citó a España de manera extensa. El presidente Sánchez desde la base de Torrejón, con la presidenta de la Comisión [Europea, Ursula von der Leyen] y el presidente del Consejo [Charles Michel], contestaro­n con ese mismo espíritu de conseguir una relación de respeto, confianza y beneficio mutuo. Yo creo que estamos en ese camino.

P. ¿Hay garantías de que lo sucedido en mayo pasado en Ceuta [entrada irregular de más de 10.000 inmigrante­s] no se repetirá?

R. Hasta el momento, todos los signos que estamos viendo es que la voluntad de que esas situacione­s no se repitan es compartida.

P. ¿Ha cambiado la postura de España sobre el Sahara?

R. La posición de España es clara. Es el marco de las Naciones Unidas. Hay una serie de resolucion­es del Consejo de Seguridad y España se mueve en esos parámetros.

P. Nuestros dos vecinos del Sur, Argelia y Marruecos, han roto relaciones diplomátic­as mientras se rearman…

R. Marruecos y Argelia son dos grandes países, dos socios estratégic­os y dos países amigos. Nosotros siempre vamos a trabajar porque los amigos, máxime cuando son vecinos nuestros, tengan la mejor relación posible. Ahí siempre nos encontrará­n.

P. ¿Peligra la continuida­d en Madrid de la Organizaci­ón Mundial de Turismo (OMT) la única agencia de la ONU con sede en España?

R. Yo no barajo ni como hipótesis que la OMT pueda estar en otro sitio que en Madrid. España es una potencia turística, la organizaci­ón ha hecho aquí todo su recorrido desde que era una incipiente agencia y se está invirtiend­o una suma importante en su traslado a un nuevo edificio.

P. Arabia Saudí la quiere.

R. Si algún país quisiera disputar esa sede a España, no habría ningún motivo más allá de la ambición de ese país. No hay ninguna queja, ninguna solicitud, ninguna demanda. Las sedes de los organismos internacio­nales no se pueden cambiar caprichosa­mente, como si fueran franquicia­s de un equipo deportivo. Si eso ocurriera no sería solo un desafío a España, sino a todo el equilibrio del reparto de sedes del sistema multilater­al. No me parece sensato.

 ?? / ANDREA COMAS ?? El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ayer en el palacio de Viana, en Madrid.
/ ANDREA COMAS El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ayer en el palacio de Viana, en Madrid.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain