El narco se fabrica sus propias pistolas
La Guardia Civil detecta un aumento en el uso de armas artesanales o rehabilitadas entre las organizaciones criminales
La Operación Cañonero de la Guardia Civil de Alicante incautó el 24 de febrero en una instalación rural perdida en plena montaña en Hondón de las Nieves (Alicante, 2.544 habitantes) un arsenal de 79 armas manipuladas por un delincuente habitual que tenía conocimientos de tornero y era capaz tanto de rehabilitar armas inutilizadas como de fabricar piezas desde cero. Pese a que el tráfico de armas en España es moderado o bajo, la Guardia Civil detecta un progresivo aumento de pistolas, revólveres y fusiles de guerra vinculados principalmente al tráfico de drogas. Con las fuertes restricciones de la legislación española, los grupos organizados recurren a la rehabilitación y a la compraventa por internet para acorazar sus almacenes, robar material a otras bandas o perpetrar ajustes de cuentas, según desvelan dos oficiales de la Guardia Civil, el cuerpo responsable de la tramitación y control de armas de fuego en España, que prefieren ocultar su identidad.
Las alertas se agudizaron en diciembre de 2020, a raíz de la Operación Nongreta, llevada a cabo en Málaga, que “partió de la detección de un aumento de ajustes de cuentas entre narcos con armas manipuladas” y en la que la Guardia Civil “desmanteló un taller clandestino de fabricación de fusiles de asalto”, recuerda un capitán del Grupo de Tráfico de Armas de la jefatura de Información de la Unidad Central Especial (UCE3) del instituto armado. “Las usan sobre todo para la defensa de las guarderías, los lugares donde esconden y desde donde distribuyen los alijos de drogas” y también para cometer “vuelcos, los robos de droga a otros grupos criminales”. “Esta clase de delincuentes organizados busca armas potentes, con silenciador, cuyo uso está prohibido en España, e incluso granadas de mano”, ratifica el capitán.
En el caso de Alicante, añade un teniente del grupo de Información de la comandancia alicantina, sorprendió “el volumen de armas encontradas y que el detenido fuera capaz de fabricarlas desde cero, sin piezas industriales, sino a partir de planos y maquetas con las que las replicaba con sus conocimientos de tornero”. Son artefactos “con un peligro añadido”, ya que no constan en ningún registro. Esta operación, en la que se produjeron tres arrestos, revelaba también que, aunque el tráfico de drogas se asentaba sobre todo en el Campo de Gibraltar y la Costa del Sol, la presión policial está empujando a las bandas criminales hacia otros lugares de la geografía española, principalmente el Levante y el sur de CastillaLa Mancha.
En España, donde “la legislación es muy restrictiva, a consecuencia del terrorismo, principalmente, de ETA”, no es fácil hacerse con un arma, señala el capitán de la unidad central. “A los delincuentes les interesan las armas cortas, como pistolas o revólveres, y las de guerra, como los fusiles de repetición, y de esa clase aquí no se fabrican”. Con la reconversión industrial, las armerías cerraron. “Ya solo quedan empresas especializadas en escopetas y rifles de caza”, prosigue el capitán, “cualquier otro tipo de arma de fuego viene de fuera”.
Las bandas deben recurrir a la fabricación artesanal o a la rehabilitación de armas importadas por internet “gracias a vacíos legales y diferencias legislativas existentes en otros países”. “El origen principal son Eslovaquia y la República Checa”, detalla, “países que durante la Guerra Fría acumularon mucho stock”. Tras la desaparición de la URSS, “para dar salida a este arsenal lo comenzaron a manipular para convertirlo en armas de fogueo detonadoras, pero la inhabilitación es fácilmente reversible”. Tanto, que en España se modificó la ley en 2017 “para que este tipo de armas tampoco fueran de comercio libre, y su compra exige gran cantidad de certificados y registros”, asegura.
En España la legislación es muy restrictiva a causa del terrorismo
La mayoría de las piezas vienen de Eslovaquia y República Checa
Impresiones 3D
El teniente de la comandancia alicantina desmonta un mito, el de las armas impresas en 3D. “En Europa no se ha encontrado ninguna fabricada íntegramente con este sistema, porque hay piezas que no resisten la presión que ejerce cuando se disparan”.
Donde no suelen hallarse armas de fuego es en el ámbito de las células terroristas, confirman los dos oficiales. “En el terrorismo no se necesita gran infraestructura”, declara el teniente, “las armas no son necesarias para crear terror y caos”. Como ejemplo, pone la célula de Barcelona, que, “aunque tenía una estructura jerárquica, no disponía de armas”. “El terrorismo actual suele atacar por medio de lobos solitarios que generalmente no tienen acceso a este tipo de armas”, ratifica el capitán. “Usan cuchillos y furgonetas porque su principal objetivo es llamar la atención”. “En España, desde el 11-M, no se les permite avanzar demasiado y es rara la célula que usa armas de fuego”, añade.