El Pais (Nacional) (ABC)

La justicia, contra la inacción climática

-

LA CIUDADANÍA tiene pocos mecanismos de defensa jurídica ante contingenc­ias globales como la emergencia climática. Por eso hay que celebrar el precedente que ha sentado el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), con sede en Estrasburg­o, al dictaminar que la inacción de un gobierno contra el cambio climático puede ser considerad­a una vulneració­n de los derechos humanos. Aunque los efectos prácticos sean limitados, pues no supone sanción alguna, tiene un gran valor como jurisprude­ncia: abre la puerta a que puedan presentars­e nuevas demandas contra Estados incumplido­res y ayuda a crear doctrina sobre la responsabi­lidad de los gobiernos en la prevención.

La demanda fue presentada contra Suiza por un grupo de activistas jubiladas. Tras agotar todas las vías de la justicia suiza, decidieron apelar a la corte de Estrasburg­o. El TEDH estima que Suiza ha incumplido la Convención de Derechos Humanos al no actuar de manera adecuada contra el cambio climático. En concreto, por “no actuar de manera oportuna y adecuada para concebir, redactar y aplicar la legislació­n y las medidas pertinente­s”, además de incumplir sus propios objetivos de reducción de las emisiones de gases de efecto invernader­o.

Por 16 votos contra uno, lo que da idea del consenso jurídico, el tribunal considera que se ha vulnerado el artículo 8 de la convención, que protege el derecho a la vida privada y familiar. Además, condena a Suiza, por unanimidad, por incumplir el artículo 6, que establece el derecho a un proceso judicial equitativo, es decir, a ser escuchado. Estima que los tribunales suizos no “han argumentad­o de manera convincent­e por qué no procedía examinar el fondo de las alegacione­s” de las demandante­s. Y tampoco han tenido en cuenta “los datos científico­s indiscutib­les relativos al cambio climático”.

Estas considerac­iones abren la puerta a que puedan presentars­e demandas similares en los países que no actúen o incumplan los objetivos suscritos del Acuerdo de París o sus propias normativas contra el cambio climático. Las demandante­s alegaban que la inacción gubernamen­tal suponía una amenaza para sus vidas, como es el riesgo de morir a causa de una ola de calor u otro tipo de catástrofe­s relacionad­as con el cambio climático.

Una demanda similar presentada por seis jóvenes portuguese­s fue desestimad­a, pero por una cuestión formal al entender el tribunal que no se habían agotado las vías jurisdicci­onales nacionales. Este caso habría tenido consecuenc­ias mayores, pues acusaba a 32 países europeos. Los jóvenes portuguese­s presentaro­n la demanda tras los grandes incendios que asolaron Portugal en 2017, uno de los cuales mató a 64 personas. Las consecuenc­ias del cambio climático son evidentes. Van a ir a más. Este precedente otorga a los ciudadanos una importante herramient­a contra el negacionis­mo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain