Polonia da el primer paso para suavizar la restrictiva ley del aborto
El Parlamento enviará a una comisión especial las cuatro propuestas de los socios de Gobierno
Un Gobierno y cuatro propuestas legislativas diferentes sobre el aborto. El asunto que más divide a la coalición liberal que llegó al poder en Polonia el pasado diciembre ha aterrizado en el Sejm (la Cámara baja del Parlamento). Después de un intenso debate, la mayoría parlamentaria decidió ayer enviarlas todas a una comisión especial para seguir trabajando en ellas.
El Ejecutivo de coalición había mostrado su profunda división en torno a este tema, y no estaba muy claro si las propuestas que piden legalizar la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 12ª iban a seguir el trámite parlamentario, como al final ocurrió. Activistas a favor del derecho a decidir recibieron la votación con una gran celebración en los pasillos de la Cámara, como informaron medios locales.
Los partidos que hoy Gobiernan el país llegaron al poder el pasado diciembre con el impulso de las mujeres. En 2020, el Tribunal Constitucional, a instancias del partido ultraconservador Ley y Justicia (PiS), declaró ilegal el aborto también en caso de malformación del feto, reduciendo los supuestos permitidos a dos: cuando la vida de la madre corra peligro y si el embarazo es producto de una violación. Polonia se convirtió así en uno de los países más restrictivos de la Unión Europea, solo después de Malta. La decisión del tribunal generó un movimiento de protesta que las muertes de varias mujeres a las que se les negó la intervención quirúrgica siguió avivando. Esas mujeres, que escucharon las promesas de los partidos liberales de que el aborto volvería a ser legal en el país, se movilizaron para convertir las palabras en hechos en las elecciones de octubre de 2023.
En los comicios regionales y locales del pasado domingo, el Gobierno, que llegó dividido a las urnas por este y otros asuntos, recibió su primer toque de atención del electorado. La Coalición Cívica (KO) del primer ministro, Donald Tusk, de centroderecha, y la progresista Nowa Lewica (Nueva Izquierda) defienden la legalización del aborto sin ningún tipo de supuesto hasta la semana 12ª. Sin embargo, cada uno ha presentado una propuesta distinta. En el caso de embarazos como consecuencia de violación, KO propone permitir el aborto hasta la semana 18º, mientras la izquierda eleva la posibilidad hasta la 24ª. En los dos proyectos de ley se extiende hasta la semana 24ª el tope para abortar cuando la vida y la salud de la madre está en riesgo, y la izquierda añade también la salud mental. En el supuesto de malformación del feto, ambos textos permiten interrumpir el embarazo sin límite de tiempo. Ambas propuestas recibieron el respaldo de la mayoría parlamentaria liberal, pese al rechazo de ocho diputados del partido agrario conservador PSL y la abstención de 15. Los democristianos de Polska 2050, que junto a PSL forman la Tercera Vía y también están integrados en la coalición de Gobierno, apoyaron que las iniciativas sigan el trámite parlamentario, aunque rechazan el contenido.
En una propuesta separada, la izquierda también pide despenalizar la ayuda al aborto. De nuevo, siete diputados del partido agrario PSL la rechazaron y 15 se abstuvieron. PiS rechazó todas las propuestas.
La cuarta iniciativa, la de los conservadores de Tercera Vía, propone volver al conocido como “compromiso del aborto” de principios de los noventa. Salió adelante pese al rechazo de los ultras de Confederación, Kukiz15 y PiS (aunque 21 de sus diputados se abstuvieron), que votaron a favor de rechazar la tramitación, y aunque ni a KO ni a la izquierda les parece suficiente.
Los dos socios conservadores planteaban que cualquier decisión se ratifique en referéndum, pero no lograron las 69 firmas necesarias para registrar la iniciativa.
Conservadores y progresistas difieren en los plazos para la legalización
El voto de las mujeres fue clave en el ascenso de la coalición liberal al Gobierno en 2023