Agresión ultra al exalcalde socialista de Ponferrada
Dos hombres propinan puñetazos y patadas a Olegario Ramón a las puertas de la sede del partido en la ciudad leonesa
El parlamentario socialista y exalcalde de Ponferrada (León) Olegario Ramón, de 53 años, fue agredido anteayer por la tarde por simpatizantes de la extrema derecha cuando salía de la sede de su partido en la localidad, a cuyas puertas los agresores se concentran habitualmente. El ataque lo perpetraron dos hombres, que insultaron, zarandearon y dieron puñetazos y patadas de Ramón, que sufrió lesiones de escasa consideración y que, tras acudir a un hospital, denunció los hechos en una comisaría. Un hombre de 67 años fue detenido ayer por su implicación en los hechos, según fuentes policiales.
La agresión sucedió a última hora de la tarde, en una de las calles principales de Ponferrada y muy cerca de la sede socialista. El exregidor, desplazado por una alianza del PP, Vox y Coalición por El Bierzo, salía del local en dirección a su coche. Enfrente, unas 10 personas con banderas de España cantaban y gritaban consignas contra el PSOE y contra el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, como viene pasando a diario hace meses, desde la investidura, y también contra los vecinos de la zona que llaman a la Policía por las molestias ocasionadas.
Según la versión del político, al dirigirse hacia donde estaban los concentrados para recoger su vehículo, una persona con megáfono le dijo “que estaba provocando” y cuando comenzaron los insultos y amenazas Ramón sacó su móvil para grabar la secuencia. “Como yo seguía y él no paraba, he sacado el móvil para grabarlo y otra persona me ha dado un manotazo y tirado el móvil y cuando he ido a recogerlo me ha dado varias patadas y dicho varias barbaridades y amenazas”, relataba ayer el socialista a EL PAÍS.
“No he dormido muy bien. La herida de la pierna es leve y curará, el dedo no lo puedo cerrar y ha ido a peor”, explicaba el agredido. “Estoy preocupado por el mundo que vamos a dejar a mis tres hijos. Yo recibo insultos por la calle, mi pareja estaba muy nerviosa. Mi hijo el mayor tiene 21 años y muchas inquietudes sociales. Anoche me decía ‘Papá, ¿te merece la pena?’. Le contesté que por supuesto”, contaba ayer.
“Son un grupo de ultraderechistas, llevan allí todos los días. Intentamos no entrar en provocaciones para que no haya lío, pero hoy ha ocurrido”, lamentaba el afectado, quien llama a la calma: “Hay que bajar a la crispación, estamos permanentemente crispando en las Cortes, Congreso o Ayuntamientos y se traslada a la calle y sucede lo que sucede. Hay que dejar de enfrentar a la gente”.
El PSOE federal condenó el ataque en las redes sociales. La sección de Castilla y León expresó también su repulsa. “Estos hechos no son sino el fuego del odio que viene propagando la extrema derecha en las instituciones y los medios de comunicación”, dijo su líder autonómico, Luis Tudanca. “No nos callarán porque los demócratas somos más luchando por la convivencia y el respeto”, incidió el líder regional.
Castilla y León es la primera comunidad autónoma en la que el PP gobierna en coalición con la extrema derecha, desde marzo de 2022. Tanto el presidente autonómico, Alfonso Fernández Mañueco, del PP, como el vicepresidente, Juan García-Gallardo, de Vox, condenaron ayer la agresión sufrida por el político socialista.
“Quiero expresar mi más firme condena ante este acto de violencia sufrido en la persona de Olegario Ramón. Te envío todo mi apoyo y afecto”, escribió Fernández Mañueco en la red social X.
“Condeno rotundamente esta agresión injusta contra Olegario Ramón. La violencia contra el adversario político no debe ser la respuesta. Oposición, toda. Violencia, cero”, escribió García-Gallardo en el mismo foro el jueves por la noche. El vicepresidente regional ha participado en Madrid en concentraciones ultras ante la sede federal socialista en la calle Ferraz contra la ley de amnistía
al procés. Y en la mañana de ayer volvió a su discurso frentista: “Cero lecciones de nada y mucho menos de tolerancia de la banda corrupta socialista, con 140 años de historia criminal, que lidera un frente con los separatistas y ETA para destruir España. Serán derrotados sin violencia, con la fuerza de la verdad”.
“No tengo ninguna duda de que la causa [de la agresión] está en el momento en que la ultraderecha gana un espacio político a través de Vox y el PP intenta competir con ellos y a veces se sitúa casi como ellos con unas estrategias de mentiras, ruido y palabras gruesas”, sostiene el político. “Vox genera un caldo de cultivo trasladado a la ciudadanía y deriva en una agresión”, lamentaba Ramón, sorprendido por la mirada de “odio” de su atacante, a quien no conoce. Su tono se elevaba al hablar del discurso de que “todos tienen la culpa” y que reparte por igual las responsabilidades: “No voy a admitir la equidistancia, hay algunas contestaciones del PSOE que es mejor tranquilizar, pero la causa es la causa y no voy a admitir que todos somos iguales”.
El alcalde de Ponferrada, Marco Antonio Morala (PP), también condenó los hechos, pero para su predecesor de poco sirven esas palabras cuando cargos del PP y de Vox han participado en las concentraciones. “¡Cuánta hipocresía ir a las concentraciones a ser el primer agitador y cuando luego agreden a un político salir con un comunicado, los que encienden el fuego quieren apagarlo!”, exclama Olegario Ramón, quien ha recibido el apoyo de sus compañeros de filas y de grupos de izquierdas. El PP, insiste, posee culpa por “blanquear y justificar” a sus socios con medidas como la ley de Concordia planteada en Castilla y León: “Están blanqueando el fascismo”.
“La causa es la causa y no voy a admitir la equidistancia y que todos son iguales” Olegario Ramón Exalcalde socialista de Ponferrada