El Baskonia gana en Bolonia y consigue terminar octavo

Markus Howard es oro puro para el Baskonia, que consiguió, gracias a su victoria en Bolonia, el octavo puesto que le da dos oportunidades de meterse en el playoff. Los 34 puntos del norteamericano fueron decisivos para el triunfo de los vitorianos (91-95), que cuajaron una gran segunda mitad.

El primer cuarto fue una lucha igualada, con el equipo italiano casi siempre por encima, pero con el Baskonia siempre cerca. Se estiraba la goma hasta los cinco puntos de diferencia, pero siempre volvían los vitorianos al partido, incluso en los minutos finales se pusieron por delante, pero la flojera en el rebote defensivo les condenó a irse en desventaja mínima a la pausa antes del segundo cuarto (22-21).

Los males se multiplicaron en el regreso a la cancha. Siguió el Baskonia demasiado flojo debajo de los aros, sin opciones al rebote, y los boloñeses, liderados por Lundberg y Belinelli, empezaron a coger una ventaja preocupante, que llegó a los trece puntos. Una reacción final de los hombres de Ivanovic permitió maquillar los números en el descanso (53-44).

Fue tras el paso por el vestuario cuando apareció el Howard terrorífico para los rivales. Anotaba desde el exterior y también penetrando hacia la canasta, en acciones de dos más uno que hicieron mucho daño al Virtus. Además, el Baskonia se aplicó mejor en defensa, rebañó más rebotes y consiguió ponerse por delante en el marcador, hasta

con siete puntos a su favor. Miller-Mcintyre, con tres bandejas consecutivas se unió a la fiesta de Howard.

Pero el duelo no se resolvió hasta el final, porque reaccionaron los italianos, con Mickey como protagonista inesperado. Sus canastas llevaron el marcador al empate (90-90). Entonces fue Costello quien se erigió en el salvador. A 16 segundos para el final puso, con dos tiros libres, una diferencia de tres puntos. Perdió el Virtus la pelota en el posterior ataque y Moneke, con un tiro libre, puso la guinda.

El Olympiacos de El Pireo se impuso en la prórroga al Fenerbahce de Estambul (84-81) lo que da al conjunto griego la quinta plaza y un cruce en playoff con el Barça (derrotado en Lyón, 7672) , con factor cancha a favor del equipo catalán.