Rocha, acorralado también por el TAD
La impugnación del proceso electoral frena la proclamación del presidente federativo
El último capítulo en el culebrón con sede en la Ciudad de Fútbol de Las Rozas deja a la Federación Española de Fútbol (RFEF) compuesta y sin novio. El Tribunal de Arbitraje del Deporte (TAD) ha incoado un expediente sancionador a Rocha y a toda la comisión gestora por infracción muy grave. El origen es una denuncia de Miguel Galán, presidente de la escuela de entrenadores Cenafe, que le acusa de haberse extralimitado en sus funciones como presidente “interino” y de retrasar la convocatoria electoral. La resolución del TAD al respecto fue remitida ayer al Consejo Superior de Deportes (CSD), que está analizando las 39 páginas de las que consta el escrito “para definir los siguientes pasos”, según informaron fuentes del Consejo a este diario. Mientras se estudia la posible inhabilitación de Rocha y el resto de miembros de la federación que integraban el núcleo duro de la misma tras sobrevivir a la crisis de Rubiales y al efecto último de la Operación Brodie, la RFEF sigue sin rumbo y sin una cabeza visible ni nadie capaz de firmar un solo contrato para avanzar en el día a día.
El TAD añade picante e incertidumbre a la situación. Pero hay más caminos para cercar a Rocha y su gente de confianza. La comisión electoral ha admitido la impugnación del reciente proceso electoral, de acuerdo con otra solicitud de Miguel Galán, el hombre que se ha propuesto cambiar el rumbo en el seno del órgano que rige el fútbol español. Y descabezarlo. Así, Pedro Rocha, investigado desde el pasado viernes en la conocida como Operación Brodie, todavía no puede ser proclamado presidente. El movimiento de Galán, que impugna las elecciones por considerar que los avales presentados por Rocha no son válidos, bien por “estar caducados”, bien por “haber sido obtenidos en un presunto fraude electoral”, pone freno al proceso y abre un nuevo plazo: el 26 de abril, la fecha tope señalada en el calendario electoral y para cuando debería haberse resuelto la causa. Para entonces habrá que ver si Rocha llega a ser nombrado, acechado como está por la justicia y por la vía administrativa.
Durante el proceso electoral abierto recientemente Rocha no tuvo oposición. Ningún otro aspirante a la presidencia de la Federación logró reunir los avales suficientes (21) para presentar oficialmente su candidatura. La proclamación oficial de Rocha, sin embargo, no se produjo ayer, como estaba previsto. Galán ya había advertido de que impugnaría el proceso. Y así lo ha hecho. El resultado de las elecciones sigue en el aire. Como el futuro de la propia federación, vigilada en la distancia por el CSD y la FIFA, que está cada día más preparada para intervenir la RFEF.
Rocha, por su parte, asume que solo le queda “esperar a las decisiones del TAD y responder a todas las cuestiones que se le planteen”, señalan fuentes cercanas al mandatario extremeño. El aspirante a la presidencia, en su día delfín de Rubiales, no se plantea dimitir. “Su idea es seguir adelante, ya que siente que se está cometiendo una terrible injusticia y que sigue teniendo el apoyo del fútbol español”, insisten. Esos apoyos, que se hicieron patentes en los 107 avales que presentó para fortalecer su candidatura, empiezan a resquebrajarse. Al menos 11 presidentes de las federaciones territoriales se reunieron ayer para evidenciar su posición contraria al virtual presidente federativo y pedirle que dé un paso al lado.