Chery hará 150.000 coches al año en Barcelona desde 2029
El Gobierno cifra en 400 millones la inversión para reindustrializar la instalación de Nissan
Mister Chery. La antigua fábrica de Nissan en la Zona Franca de Barcelona, que ensambló su último vehículo en diciembre de 2021, se vistió ayer de gala para recibir a la automovilística china Chery, que devolverá a la vida al mayor símbolo de la desindustrialización de Barcelona de las últimas décadas. El fabricante con sede en la localidad de Wuhu escenificó la firma de su alianza con la española EV Motors, compañía con la que llevaba meses negociando para transformarse en la primera firma china en producir coches en España. El objetivo de la alianza empresarial es llegar a los 150.000 coches producidos al año a partir de 2029.
Con este acuerdo, Chery hará en Barcelona coches de sus marcas Omoda y Jaecoo, mientras que EV Motors relanzará la antigua firma Ebro (con la tecnología que le proporcionará su socio chino), que se dejó de producir en 1987 y que ahora cumple 70 años desde su nacimiento. Ambas empresas prometen recuperar 1.250 puestos de trabajo destruidos por el adiós de Nissan. “Es una cooperación estratégica entre dos países. Promoveremos aún más la alta calidad de la industria automotriz española”, afirmó Zhang Guibing, vicepresidente de Chery International.
En la nueva fábrica, rebautizada como Ebro Factory —y que incluye también la planta de Montcada i Reixac dedicada a la estampación y soldadura de piezas metálicas— Chery comenzará su producción en el cuarto trimestre de este año, con la fabricación de unidades semiensambladas provenientes de China de su Omoda 5, tanto en sus versiones de combustión como eléctrica, para luego hacer el vehículo al completo (como adelantó CincoDías la semana pasada), previsiblemente en 2025. Tras el Omoda 5, a fines de año, llegarán los primeros Ebro: dos modelos SUV de segmentos medio y medio-alto, con motorizaciones híbrida enchufable y de combustión, bajo una plataforma y una tecnología compartidas con Chery. “Luego vendrán el Jaecoo 7, la pick up eléctrica de Ebro, y con todo ello podremos relanzar la producción. Tenemos el compromiso de renacer la marca Ebro y de llegar a 150.000 coches en 2029 [junto a Chery]”, subrayó el consejero deBienvenido, legado de Ebro, Pedro Calef, en el acto celebrado ayer en la planta, al que también acudieron el presidente de Gobierno, Pedro Sánchez, el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, y autoridades de la compañía china. En un plazo más corto, en 2027, Ebro y Chery prevén llegar a las 50.000 unidades anuales.
“Hoy hemos conseguido la reindustrialización de una de las plantas de automóviles más importantes de los últimos 80 años en Cataluña. Hace cuatro años Nissan anunció el cierre de sus instalaciones, y teníamos muy claro que debíamos superar esta dificultad, no bajar los brazos. Por esto ahora estamos muy satisfechos”, celebró Aragonès. “Desde el mismo día en que Nissan anunció el cierre de su planta [2020], el Gobierno de España ha desarrollado un intenso trabajo para materializar una inversión aproximada de 400 millones de euros [de dinero público y privado]”, añadió Sánchez. También destacó la colaboración entre las administraciones catalana y central: “Demuestra la capacidad de atraer grandes inversiones extranjeras, porque unidos somos imparables”.