La tierra favorita de Sabalenka
La arolladora Aryna Sabalenka, número dos del mundo, comenzó 2024 como un tiro: hizo final en Brisbane y conquistó por segundo año el Open de Australia. Desde entonces, cuatro derrotas y cuatro victorias. Su bajón, que comenzó en febrero en Dubái (primera ronda), se ha juntado con la muerte de su expareja, el exjugador profesional de hockey sobre hielo Konstantin Koltsov, que perdió la vida con 42 años en marzo en lo que la policía describió como un “aparente suicidio”. La bielorrusa (26 años el 5 de mayo), casi no ha hablado del tema. En Instagram dijo que su corazón estaba roto aunque ya no eran pareja, y pidió privacidad. Solo unos días después, derrotó en Miami a su amiga Badosa, pero perdió en la siguiente ronda ante la ucrania Kalinina (31ª). Tras caer también la semana pasada en su segundo choque en Stuttgart ante la checa Vondrousova (7ª), ayer se estrenó con un triunfo ante la polaca Magda Linette (6-4, 3-6, 6-3, 2h 12m) en su defensa del Madrid Open, el único torneo que ha conquistado sobre arcilla (2021 y 2023).
Madrid es el escenario en el que mejor se desenvuelve Sabalenka, la tenista que más fuerte le pega a la bola, sobre tierra. En 2021, con 23 años, se convirtió en la segunda ganadora más joven del torneo, por detrás de la checa Petra Kvitova (21 años cuando venció en 2011). Fue su primer éxito sobre arcilla. El segundo y último llegó en 2023, en una final formidable en la que tumbó a la número uno, la polaca Iga Swiatek.
Su bola pesada fluye más en Madrid por los 657 metros de altitud de la ciudad. Lo sufrió ayer Linette. “La altitud y los botes [de la bola] me ayudan”, reconoció Sabalenka tras llegar a sacar a 196 kilómetros por hora, por encima de muchos jugadores.
La bielorrusa está en plena lucha con Swiatek por arrebatarle el número uno. El año pasado lo logró de forma efímera, entre septiembre y noviembre. Madrid es el único torneo sobre tierra en el que ha conseguido doblegar a la polaca. En los choques de Roma (2022) y Stuttgart (2022 y 2023) cayó en todos (6-3 en el global).
Para quitarle el trono a Swiatek, que domina el circuito desde que la australiana Ashleigh Barty se retiró en 2022, Sabalenka necesita mejorar sus resultados en tierra, donde el año pasado llegó al fin a la semifinal de Roland Garros, en el que hasta entonces no había pasado de tercera ronda. “Me voy a asegurar de pelear cada punto y, si tengo oportunidades, aprovecharlas. Es mi mentalidad para la tierra”, dijo la bielorrusa.
Para empezar a conquistar títulos (suma 14), Sabalenka corrigió la tara que tenía con el servicio: las dobles faltas. Contrató a un biomecánico y mejoró la técnica. También dio un paso adelante en lo físico y evolucionó su juego de pies. En Madrid, este 2024 es el sexto año que compite. En 2018, 2019 y 2022 cayó en primera ronda, pero las anteriores dos veces en las que logró superar el primer escalón (2021 y 2023), como hizo ayer, se alzó con el trofeo en su tierra batida predilecta.