La inspección municipal del piso donde vive Ayuso sigue en espera

La visita de los inspectores del Ayuntamiento de Madrid al piso donde vive la presidenta Isabel Díaz Ayuso sigue esperando, casi dos meses después de que Más Madrid presentara una denuncia por infracción urbanística. El concejal presidente de Chamberí, Jaime González Taboada (PP), insistió ayer en que hará la inspección que anunció hace un mes y que les corresponde por ser el distrito donde se ubica la vivienda, pero añadió que antes deben resolver otros expedientes que llegaron con anterioridad. Taboada respondía a una pregunta del PSOE en el pleno mensual de la Junta de Chamberí sobre si ya se había hecho ese registro y, en caso contrario, cuánto tiempo calculaba que tomaría para realizarlo. Taboada evitó dar un plazo y dijo que se hará “cuando toque”.

“Le vuelvo a repetir lo que dije el mes pasado”, respondió Taboada al portavoz socialista en Chamberí, Iñaki Prieto. “Primero son las emergencias (urbanísticas) de policía o de bomberos y luego van el resto. ¿Quiere que le diga cuándo se va a visitar la casa? Cuando corresponda. Cuando los técnicos de la materia lleven ese expediente, porque ningún vecino de este distrito es más importante que otro. Pero sí le digo una cosa. No tenga la más mínima duda de que se va a visitar esa casa, sea quien sea el propietario. Que le quede claro”.

La portavoz de Más Madrid en el Ayuntamiento, Rita Maestre, presentó el 19 de marzo una denuncia ante la Junta de Chamberí por infracción urbanística con base en los indicios que habían aparecido en prensa. elDiario. es reveló que la pareja de Ayuso lo había comprado después de cometer un presunto fraude fiscal de 350.951 euros. Días después surgieron las sospechas sobre la ilicitud de unas obras que había iniciado González Amador en agosto de 2022, días después de comprar el inmueble. El empresario había comunicado al Ayuntamiento su intención de hacer una reforma de gran calado, pero recibió dos órdenes de cese por parte de los técnicos municipales. Según reveló EL PAÍS, la obra continuó tras esas notificaciones y no figura ningún permiso en tres bases de datos urbanísticas.