Un compromiso con la estabilidad de los precios
A diferencia del Banco Central Europeo (BCE), cuyo mandato pasa únicamente por mantener la estabilidad de los precios, la Reserva Federal persigue también y, sobre todo, la estabilidad en el crecimiento económico.
Con el cambio de postura escenificado ayer por Jerome Powell con el mero gesto de eliminar la palabra “paciencia” de su discurso, deja entrever una acción preventiva de recorte de tipos que estaría anticipando a una moderación mayor de la esperada del crecimiento, como hizo en 1995 y después en 1998 por la crisis financiera en Rusia. Pero este movimiento también se entiende como un intento por probar su compromiso con el objetivo de inflación. Se trataría, por tanto, de un reequilibrio de estrategia antes de que la política monetaria sea un riesgo. La Reserva Federal muestra así su preocupación por el bajo desempeño de la inflación, que ronda el 1,5%, tres décimas menos de lo pronosticado hace tres meses y medio punto por debajo de su objetivo, el 2%, el límite fijado para la estabilidad de precios.