Cartas de invitación y falsos contratos
Dentro del modus operandi de los investigados estaba también el hecho de que se aprovechaban de sus compatriotas y de su difícil situación en Siria para emplearlos en su organización delictiva y llevarlos a España como inmigrantes clandestinos. Además, usaban sus empresas para activar el sistema de cartas de invitación para trasladarse a España a través de contratos falsos.
Muchos de esos ciudadanos captados de entre la desesperación eran utilizados después como correos humanos para introducir ilegalmente su dinero en Siria. para transferir los fondos al país deseado.
Según los investigadores, en abril de 2018 los detenidos lograron activar una vía de transporte de mercancías para sus negocios en la ruta Damasco-Hama-Idlb y Turquía. Ese paso solo es practicable para aquellos con contactos directos en las milicias terroristas que controlaban la zona y que ponían los medios necesarios para que los efectos de los detenidos y las personas que ellos determinasen llegaran a destino.
Arrestados ya en 2008
Uno de los arrestados, miembro del clan que dirige la organización, fue detenido en Siria en 2008 y condenado por su participación en un atentado, así como por su integración en la organización terrorista yihadista Fatah al Islam. Tras cumplir condena regresó a España para reciclarse en los negocios familiares. Como parte del sistema de blanqueo de capitales, los detenidos lavaban parte del dinero que obtenían ilegalmente engrosando otras facturas o simulando actividades mercantiles para introducir en el circuito legal cantidades que estaban en b.
Esta organización se encuadra presuntamente dentro de una macroestructura financiera internacional clandestina que “pretende desestabilizar el sistema económico capitalista occidental y. al mismo tiempo, el sostenimiento y apoyo a organizaciones terroristas yihadistas a Al-Qaeda y afines”, sostienen los investigadores. En la macrooperación han colaborado Europol y la Oficina Antifraude Agencia Tributaria, además de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras y las Brigadas Provinciales de Información de Madrid, Toledo y Valencia, bajo la supervisión del Juzgado Central de Instrucción Número 6 y de la Audiencia Nacional.