MARÍA GARCÍA YELO
Posa en el Museo Lázaro Galdiano: «De niña estudié cerca, tiene una colección de un coleccionista que además era editor y durante mi periodo en PHotoEspaña hicimos exposiciones maravillosas». una red de instituciones y agentes estable, escuchar, no imponer, provocar, sugerir, tratar con delicadeza a artistas, comisarios, gestores... Aunque parezca obvio, hay que conocer los contextos y a las personas. No es posible operar a través de Internet, es una cuestión de piel», señala. Los que la conocen destacan su habilidad para adaptarse a los cambios. Ella reclama políticas culturales ambiciosas para generar un tejido productivo cultural resiliente en España y asentar una red estable de instituciones y agentes: «Hay que desarrollar políticas de apoyo que respondan a la especificidad del sector, comunicarlas bien para que sean accesibles a los ciudadanos, y hacer que tengan visión de futuro para ver resultados, sin que dependan del interés de cargo temporales».
Con 41 años, esta madrileña ha pasado por el Reina Sofía y el Museo Esteban Vicente de Segovia, ha llevado colección privada, estuvo una primera etapa en Christie’s como responsable de arte contemporáneo, dirigió PHotoEspaña de 2014 a 2017, y acaba de regresar a la casa de subastas para llevar el arte impresionista y moderno.
Si algo le caracteriza es su discreción: «Lo que interesa es el trabajo que es resultado del esfuerzo de mucha gente. La marca que representas y el proyecto van siempre por delante». Pero si algo le fascina, son los artistas: «Nosotros somos engranajes de su maquinaria. Piensan y sienten de manera distinta. Es importante saber argumentar por qué las obras tienen ese valor y alcanzan esos precios». Por eso, a la
"Hay que argumentar por qué las obras tienen su valor"