El Pais (Madrid) - El País Semanal
Kossi Atchene
Origen: Togo. 28 años. “Viví siete meses pidiendo en la calle en Casablanca”.
Vivía en Tomegbé, cerca de la frontera de Togo con Ghana, y estaba implicado en política. El 18 de agosto de 2017 participé en una manifestación y la policía me pegó mucho. Aquel mismo día decidí irme a Europa. Dejé atrás a mis padres y a cinco hermanos.
Viajé en coche hasta Abiyán. Tenía 400 euros para pagar el transporte, Empleé cuatro meses para llegar a Argelia en camiones. En Malí, los tuaregs nos asaltaron y nos quitaron todo lo que llevábamos. Cuando llegamos a Argel, conseguí trabajo de albañil. Por la noche dormía en la obra. Un día, leyendo un periódico, supe de la existencia de Ceuta y de lo que había que hacer para entrar en la ciudad.
Fui a Tánger con la esperanza de pasar a Ceuta en una zódiac, pero la policía me acosaba y tuve que marcharme a Casablanca. Allí viví siete meses pidiendo en la calle y dormí en la estación de autobuses. A veces, las madres marroquíes me daban comida que les sobraba. Estaba solo. No conocía a nadie.
Un día decidí cambiar mi suerte. Tomé un autobús hasta Castillejos. Desde la estación me fui directamente al bosque. Tuve suerte. En aquel momento, cientos de personas salían para saltar la valla. [Era el 26 de julio]. Me corté con las cuchillas. [Muestra una cicatriz en el dorso de la mano derecha]. Cuando llegué al otro lado, todo el mundo corría, y yo corrí con los demás. Así llegué al CETI.