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Los mensajes de Jenny Holzer asaltan el Guggenheim.

LA ARTISTA estadounidense Jenny Holzer (Gallipolis, Ohio, 1950) es conocida por utilizar el lenguaje como su particular medio artístico. Su primera serie basada en texto, y una de las más populares de su trayectoria, se llamó Truismos (1977-1979). En ella, Holzer

transmitía clichés e ideas preconcebidas a través de pósteres que colocó en distintos lugares de Manhattan. Después comenzó a reproducir sus mensajes en bucle, colocándolos en gigantescas carteleras electrónicas. En esas piezas digitales, sus frases y aforismos tratan cuestiones profundas y polémicas como la violencia contra las mujeres, los conflictos bélicos y los abusos de poder. Al utilizar técnicas de comunicación

similares a las de la publicidad, la creadora involucra al espectador y le invita a reflexionar sobre la necesidad de un cambio social. Bajo el título de Lo indescriptible, el Museo Guggenheim de Bilbao exhibe hasta el 9 de septiembre una selección de obras de la artista realizadas a lo largo de 40 años.

En esta página, la obra de Jenny Holzer Todos caen (2012). En la página siguiente, arriba, un retrato de Billie Holiday. Abajo, el teatro romano de Mérida, que acoge el Festival de Teatro Clásico de la ciudad.