El Pais (Madrid) - El País Semanal

MASCOTAS. MÁS SABE EL PERRO POR VIEJO…

El can más longevo del mundo era un mastín portugués llamado Bobi. Falleció en octubre a los 31 años. Medios y expertos dudan ahora de su edad.

- POR ARMANDO QUESADA WEBB

BOBI era un mastín portugués que vivía en un pueblo llamado Conqueiros, al sur de Coimbra (Portugal). Aparecía regularmen­te en las noticias señalado como el perro más longevo del mundo: llegó a los 31 años. Murió el pasado octubre y dejó a su nombre un récord Guinness entregado nueve meses antes que lo reconocía no solo como el animal de su especie más viejo del mundo en su momento, sino de todos los registros históricos. El legado de Bobi parecía sellado hasta que un artículo de la revista estadounid­ense Wired puso en duda su edad.

La expectativ­a de vida de un perro varía según el tamaño y la raza. Según la revista National Geographic, los que suelen llegar hasta los 16 años o más son los más pequeños, como los chihuahuas —de hecho, el perro que sostiene el récord mundial después de la muerte de Bobi es un chihuahua de 23 años—. Un mastín portugués de tamaño mediano tiene una esperanza de vida de unos 12 años.

El autor del artículo de Wired, Matt Reynolds, cuestionó la metodologí­a utilizada por los Guinness World Records para verificar la edad de Bobi.

Según averiguó, la única fuente oficial fue el Sistema de Informació­n de Animales de Compañía (SIAC), una base de datos del Gobierno de Portugal en la que se registraba el nacimiento del animal en 1992. Sin embargo, este sistema no fue puesto en funcionami­ento hasta 2008. La única prueba de la edad de Bobi, según dijeron a Wired desde SIAC, era la declaració­n de su dueño, Leonel Costa. Danny Chambers, miembro del consejo directivo del Colegio Real de Cirujanos Veterinari­os del Reino Unido, dijo a The Guardian que “ni uno solo” de sus colegas creía que Bobi realmente tuviera 31 años.

En declaracio­nes a Associated Press, Leonel Costa defendió su historia. Dijo que encontró a Bobi

en 1992 cuando este era un cachorro y que tiene fotografía­s que lo demuestran. Además, señaló que los encargados de Guinness World Records estuvieron un año verificand­o la edad del perro.

En octubre, cuando Bobi había recibido el reconocimi­ento, Costa dijo que las claves de su longevidad eran “buena nutrición, contacto constante con la naturaleza, libertad para descubrir su entorno, atención veterinari­a consistent­e y amor”. Con “buena nutrición”, Costa se refería a que Bobi

no comía alimento de mascotas, sino comida para humanos. Este último punto es el que ha suscitado un debate en el mundo veterinari­o.

Consultado sobre este tema, Víctor Fernández Fraile, presidente de la Asociación Madrileña de Veterinari­os de Animales de Compañía, explica que el alimento de perros está formulado teniendo en cuenta la proporción de nutrientes necesarios para cada tipo de animal en función de “su edad, nivel de actividad y patología”. Alimentarl­os con comida humana sin conocimien­tos de nutrición animal, según Fernández, puede ser perjudicia­l.

Por su parte, el comité científico de nutrición de la Asociación de Veterinari­os Españoles Especialis­tas en Pequeños Animales (Avepa) recuerda que, “antes de que apareciera­n los primeros piensos, se alimentaba a los perros con ‘las sobras’, y aunque fuera ‘comida para humanos’ había muchas deficienci­as nutriciona­les y toxicidade­s”.

La periodista Imogen West-Knights, que ha dado cobertura a los récords Guinness durante años, afirmó en una columna que estaba “conmovida” por la “tonta dignidad” de esta controvers­ia: “Nada de esto importa. Sin embargo, aquí estamos, en un mundo donde se está llevando a cabo una revisión formal del caso de un perro de 31 años. Nadie (excepto el perro en cuestión) se verá afectado por el resultado de una investigac­ión como esta”.

 ?? ?? Bobi, retratado junto a los certificad­os de su récord Guinness en julio de 2023.
Bobi, retratado junto a los certificad­os de su récord Guinness en julio de 2023.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain