La ONU refuerza su apoyo ante el éxodo venezolano
Naciones Unidas ha reforzado su ayuda en la región andina para atender la crisis migratoria venezolana. El flujo de personas que huyen del régimen de Nicolás Maduro, aún con intensidad intermitente, no cesa. Este fin de semana llegó a Colombia un nuevo delegado de la ONU encargado de respaldar y coordinar el trabajo humanitario, sobre todo en frontera. Se trata del exvicepresidente guatemalteco Eduardo Stein, quien se comprometió a buscar apoyos “lo más inmediatos posibles”.
El representante especial del Alto Comisionado para los Refugiados (Acnur) y de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) dejó claro que su misión será de carácter “fundamentalmente” humanitario. “No será nuestro trabajo intervenir en discusiones de naturaleza política”, incidió ante la creciente presión internacional al Gobierno de Maduro. La desastrosa gestión económica y la profunda crisis social e institucional de Venezuela tienen un reflejo cotidiano en los más de dos millones de personas que abandonaron sus casas y viajaron en busca de oportunidades a Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Chile o Argentina.
La principal puerta de entrada
a esa nueva vida es el Puente Internacional Simón Bolívar, en el municipio de Villa del Rosario, junto a Cúcuta. Hasta allí viajó Stein para conocer de primera mano las necesidades de esa zona, que se ha visto desbordada por una emergencia hasta ahora desconocida en Colombia. “Nuestro trabajo será el de buscar apoyos lo más inmediatos posibles para enriquecer y fortalecer la labor que los Gobiernos están desarrollando. No es posible aprender a nadar por correspondencia, uno tiene que meterse al agua para nadar”, manifestó el delegado de Naciones Unidas tras reunirse con el presidente Iván Duque.
El Gobierno colombiano lleva desde principios de agosto, cuando asumió sus funciones, tratando de internacionalizar esa crisis. En la frontera ya se ha intensificado en los últimos meses el trabajo de organismos multilaterales, aunque a partir de ahora es necesario mejorar la coordinación. “La designación del doctor Stein es un reconocimiento del secretario [general de la ONU, António] Guterres de la magnitud de la crisis que se está viviendo en Colombia y que además está empezando a tener también efectos en otros países de la región”, afirmó el mandatario.
La repercusión económica de la diáspora en Colombia supera, de momento, los 1.300 millones de euros, un 0,5% del PIB, según previsiones oficiales. El objetivo no es solo paliar la crisis humanitaria sino también contener sus efectos, por ejemplo, en los servicios públicos. Alrededor de un millón de venezolanos se encuentran en el país. La migración “sí se ha incrementado”, aseguró Christian Kruger Sarmiento, director de la autoridad migratoria. Hasta el pasado 30 de agosto se habían contabilizado 935.000 venezolanos, pero ese número creció en unos 100.000 en tan solo tres semanas. “Ha sido el mes en el que más venezolanos han llegado a nuestro país a radicarse”, agregó. Mientras tanto, en los pasos fronterizos aumentan también los flujos pendulares diarios, motivados por la escasez crónica en el país vecino.