La ‘performance’ de Dolors Montserrat
En dos minutos, habló de Llarena, el máster de Montón y el besamanos real
Sobre el papel parecía sencillo. La portavoz del PP en el Congreso, Dolors Montserrat, iba a preguntar ayer a la vicepresidenta, Carmen Calvo, en el pleno de control del Congreso lo siguiente: “¿Está orgullosa de la coordinación de su Gobierno?”. Pero la presidenta de la Cámara, Ana Pastor, le dio el turno de palabra y durante los siguientes minutos Montserrat se esforzó —y logró— en hacerse un hueco en la competitiva lista de trending topics de las redes. “Tienen a las prostitutas desconcertadas”, afeó al Ejecutivo en un momento de su intervención, convertida en toda una fiesta de referencias geográficas, históricas, futbolísticas y cinematográficas, de la Tierra a la Luna y de Waterloo a las herriko tabernas abertzales.
Montserrat comenzó presentando a la interpelada: “Señoría, usted es vicepresidenta, coordinadora del Ejecutivo y además asume la presidencia en funciones en las continuas giras al extranjero de ese español universal que es Pedro Sánchez”. Enseguida llegaron los símiles. “Usted pone un esfuerzo ímprobo, pero su Gobierno parece el camarote de los hermanos Marx [del filme de 1935 Una noche en la ópera]. ¿De verdad se siente orgullosa de la coordinación del Gobierno?”, preguntó, mientras la bancada popular aplaudía. “Si me pregunta por un
“Enviaron a Màxim Huerta a la Luna, pero Duque continúa en la Tierra”
sentimiento, le diré cuál tengo: el de cumplir con mi deber constantemente”, le replicó Calvo.
Montserrat no se quedó satisfecha con la respuesta y citó lo que calificó de “momentos estelares” de la coordinación del Ejecutivo. “Sánchez amenaza con querellarse a los medios críticos mientras usted y la señora [Dolores] Delgado [ministra de Justicia] utilizan los perfiles oficiales de los ministerios para atacar a la oposición y hacer propaganda electoral. Ustedes y sus socios, ante los abucheos y silbidos del señor Sánchez, piensan que son una falta de respeto, pero en cambio, ante los silbidos a los símbolos nacionales, piden libertad de expresión. ¡Y tienen a las prostitutas desconcertadas! La señora [Magdalena] Valerio, [ministra de Trabajo] dice que son un gol por la escuadra; la señora Delgado es la máxima defensora de sus servicios, y sus compañeros los socialistas andaluces frecuentan con dinero público la prostitución [en alusión al supuesto gasto de 15.000 euros en burdeles pagados con la tarjeta de una fundación de la consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, que investiga la Guardia Civil]. Y usted, como ministra de Igualdad y andaluza y vicepresidenta, ¿a quién apoya?”, repreguntó a Calvo.
Llegados a este punto, Pastor tuvo que interrumpirla para pedir silencio en el hemiciclo. Montserrat no había terminado. “Déjenme que hable de ceses. Tienen a Màxim Huerta perplejo, por una sociedad instrumental lo enviaron a la Luna, y Borrell, Celaá y Pedro Duque continúan en la Tierra. Y Montón dice que no entiende nada, que solo plagió el máster, o sea, el programa final de máster y quien plagió la tesis continúa vivito y huyendo del Senado [en alusión a Sánchez]. Y vaya si usted se coordina. Se coordina con la señora Delgado para justamente desamparar al juez Llarena. Y el jefe de Gabinete del señor Sánchez las desautorizó. Señora Calvo, usted está completamente descoordinada y más Pedro Sánchez, que confunde lo público con lo privado, que no sabe cuál es su sitio, ni en el Gobierno ni en un besamanos. Señora Calvo, de una vez por todas, coordínese ya, coordine La Moncloa, Waterloo, la dacha de Galapagar yla herriko taberna”, remató de un tirón la portavoz popular.
Calvo utilizó su réplica para hacer otra pregunta: “Señora Monserrat; ¿ha sido una performance, no?”. La bancada socialista aplaudió, entendiendo que sí. La vicepresidenta alabó el “atrevimiento artístico” de la diputada popular, “lo mejor de la política cultural del PP” y no hizo intento alguno por contestar al amplio abanico de asuntos y alusiones que había expuesto Montserrat. “La coordinación está en el BOE”, resumió.
Los populares no dejaron ahí las referencias de índole artística. La diputada Marta Escudero comparó a Delgado con “el jinete descabezado de Sleepy Hollow”. Fue un minuto antes de llamarla “niña enrabietada”.