Los taxistas endurecen su huelga en Madrid al cortar los accesos al aeropuerto e Ifema
Los taxistas madrileños elevaron ayer el tono de la huelga para exigir una mayor regulación de los vehículos de transporte concertado (VTC) y realizaron cortes de tráfico en vías de acceso al aeropuerto de Barajas y a Ifema, donde desde hoy se celebra Fitur,
Los taxistas de Madrid y Barcelona ya realizaron una huelga de varios días el pasado julio, que desconvocaron tras la promesa del ministro de Fomento, José Luis Ábalos, de que impondría restricciones a estos vehículos, pero terminó pasando la patata caliente a las comunidades y Ayuntamientos. Ahora el sector del taxi les exige a estas administraciones que regulen los VTC. La principal reivindicación es que sea necesario contratar sus servicios con un tiempo de antelación.
Las protestas del colectivo del taxi arrancaron desde primera hora de la mañana, provocando cortes de tráfico y fuertes retenciones en la M-40, una de las autopistas de circunvalación de Madrid, a la altura de los accesos al recinto ferial de Ifema, en la zona noroeste de la ciudad. Los manifestantes
El Gobierno aprobó el decreto anti-VTC en septiembre pasado, tras las contundentes protestas de los taxistas en verano, y consiguió así desviar el foco de atención del Ministerio de Fomento a las comunidades y las grandes ciudades. Pero no se ha librado del todo de la patata caliente, puesto que las empresas creen que los cuatro años de moratoria son insuficientes y le están reclamando muchos más o compensaciones económicas. Si no reciben respuesta, acudirán al contencioso-administrativo, aseguran fuentes jurídicas. Estas hablan de hasta 16.000 pleitos llegando casi a la vez a los juzgados. “Va a ser como las cláusulas suelo”, desliza esta la feria más importante del año. En una de las protestas, que causaron importantes retenciones, un taxista resultó herido grave tras abalanzarse sobre un coche. El presidente regional, Ángel Garrido, respondió que no cederá a su principal reivindicación: que haya que contratar a los VTC con antelación.
intentaban así dificultar el acceso al recinto en el que desde hoy se celebra Fitur, la Feria Internacional de Turismo que espera acoger a unos 250.000 visitantes.
Más tarde, los taxistas se fueron desplazando para cortar otras vías que enlazan Ifema con el cercano aeropuerto de Barajas, como la M-11 o la A-2. Precisamente en esta última vía ocurrió el incidente más grave de toda la jornada, cuando un taxista se abalanzó sobre el capó de un VTC que intentaba esquivar el corte de la autovía. El piquete cayó al suelo y se golpeó la cabeza, por lo que fue trasladado al hospital La Paz, donde a última hora de ayer permanecía ingresado en la UCI con pronóstico muy grave. El causante del atropello se dio a la fuga en un primer momento, si bien por la tarde se personó en
fuente. Los abogados están a la expectativa, pero avanzan “largas batallas jurídicas”.
La semilla del problema está en la liberalización que registró el sector entre los años 2009 y 2013, gracias a la Ley Ómnibus que aprobó el Gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero en 2009 que permitía solicitar licencias de transporte con conductor sin límite. El Gobierno del PP volvió a regular el sector en 2013 al aprobar una nueva Ley de Transporte Terrestre, que imponía una ratio de una licencia de VTC por cada 30 de taxi, pero que no fue obligatoria hasta el desarrollo reglamentario, en 2015. Nunca se ha cumplido. Actualmente hay una VTC
la Comandancia de la Guardia Civil en Madrid para prestar declaración voluntariamente. Tras ello, quedó en libertad.
Las concentraciones de taxistas se repitieron por varios puntos de la ciudad, donde ayer era imposible coger un taxi. La huelga no tiene visos de solución por el momento. El presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, señaló ayer que no cederá ante la presión de los taxistas para que se obligue a los VTC a precontratar su servicio. “Esa reivindicación no la voy a aceptar”, señaló tras reunirse con representantes de Uber, Cabify y Unauto, empresas del sector de los VTC. “Estoy dispuesto a legislar en aquello que me compete, que es la captación (de clientes), pero si alguien pretende que legisle para eliminar un sector ya les digo que se han equivocado”, dijo Garrido.
El Ayuntamiento de Madrid, gobernado por Manuela Carmena (Ahora Madrid), se ofreció para mediar en el conflicto, pero el Gobierno regional rechazó crear una mesa de trabajo conjunta entre ambas administraciones. La concejal de Movilidad, Inés Sabanés, se reunió ayer con los taxistas y les trasladó que el Consistorio está dispuesto a trabajar en una regulación para los VTC, pero que para ello es imprescindible antes una ley regional. “Reclamamos que la Comunidad haga una ley que nos permita tener seguridad jurídica para fijar claramente las condiciones de contratación de los VTC”, explicaron fuentes municipales.
Con información de Lucía Franco y Daniel Gómez.