Stoltenberg advierte de que un Estados Unidos fuera de la OTAN sería más débil
La Alianza celebra su 75º aniversario bajo la sombra de la amenaza rusa
La OTAN celebra su 75º aniversario sintiéndose más fuerte y unida que nunca, pero, al mismo tiempo, consciente de que las amenazas a la “alianza más exitosa de la historia” no vienen solo desde fuera, con la guerra rusa contra Ucrania. El peligro también puede estar dentro, sobre todo si las elecciones estadounidenses de noviembre suponen el regreso del republicano Donald Trump. De ahí que el secretario general de la Alianza Atlántica, Jens Stoltenberg, lanzara ayer un mensaje claro a Washington en el cumpleaños redondo de la organización defensiva: Estados Unidos necesita tanto a la OTAN como Europa y sería más débil sin la organización transatlántica.
“Europa necesita a Norteamérica para su seguridad (…) al miscualquier mo tiempo, Norteamérica también necesita a Europa (…) juntos somos más fuertes y estamos más seguros”, dijo Stoltenberg durante la ceremonia en la sede de Bruselas de la OTAN por los 75 años de la fundación de la Alianza Atlántica. Un aniversario que se volverá a celebrar, con más fastos, durante la cumbre de julio en la capital estadounidense, donde el 4 de abril de 1949 se firmó el Tratado de Washington que dio origen a la alianza defensiva con los 12 primeros miembros.
“Gracias a la OTAN, EE UU tiene más aliados y amigos que otra gran potencia”, subrayó Stoltenberg, que también recordó que la primera vez que se activó el crucial artículo 5 de la Alianza, aquel que consagra la defensa colectiva bajo el principio de que un ataque contra un miembro de la Alianza es un ataque contra todos, fue precisamente tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra EE UU.
Las palabras de Stoltenberg fueron seguidas con atención por el secretario de Estado norteamericano de la actual administración de Joe Biden, Antony Blinken. Pero iban dirigidas al rival en noviembre del aspirante demócrata a la reelección. Porque Trump, cuyo nombre no ha sido mencionado en ningún momento, pero estaba en la mente de casi todos los ministros de Exteriores presentes, y en sus insistentes llamamientos a “mantenerse juntos”, ha vuelto a poner en cuestión la OTAN. Incluso ha llamado a Rusia a hacer “lo que diablos le dé la gana” con cualquier miembro de la Alianza que no gaste lo suficiente en defensa colectiva, en referencia a la meta del 2% del gasto en defensa del PIB señalado como meta mínima para los aliados.
El jefe de la OTAN recordó que “Europa está invirtiendo más, mucho más” en defensa y que este mismo año, para cuando los líderes de los países aliados se reúnan en Washington, “la mayoría” de los miembros de la Alianza —dos tercios de ellos— invertirán ya al menos el 2% del PIB en defensa. También insistió en que no se trata solo de una cuestión de dinero. “Los aliados europeos proporcionan militares de primera categoría, vastas redes de inteligencia y una influencia diplomática única, lo que multiplica el poderío estadounidense”, indicó el noruego.
La necesidad de mantener la unión en una alianza que ha evitado múltiples nuevos conflictos y garantizado ampliamente un largo periodo de paz para los países miembro y sus casi 1.000 millones de habitantes ha sido el mensaje unívoco de los ministros de Exteriores congregados este jueves en Bruselas para celebrar el aniversario de la Alianza, con discursos y, también, con una tarta de chocolate belga, uno de los países fundadores de la OTAN.
“Trabajamos juntos para proteger las libertades básicas, la democracia y el Estado de derecho. No son cosas que nos vienen dadas, son valores por los que hay que luchar. Mantengámonos juntos y seamos juntos más fuertes”, resumió el ministro de Exteriores letón, Krisjanis Karins.
“La OTAN sigue siendo una alianza defensiva fundamental, no solo para la seguridad euroatlántica y por supuesto de todos los españoles, sino también para la defensa de los valores que están
La ceremonia tuvo lugar ante las 32 banderas de los aliados
El noruego lanza su mensaje ante la posibilidad de que Trump gane en EE UU
siendo puestos en cuewstión, tanto por la agresión rusa a Ucrania, como también desde dentro de nuestras sociedades por las fuerzas de extrema derecha, que son los valores de democracia, de pluralismo, de tolerancia, los valores finalmente de libertad que conforman la construcción europea en nuestro sistema democrático”, subrayó tras la reunión el jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares.
La ceremonia fue celebrada ante las 32 banderas de los aliados. Que son 20 más que en sus inicios y, sobre todo, dos más desde que Rusia invadió Ucrania y llevó a países hasta entonces reticentes a formar parte de una alianza militar, como Finlandia y Suecia a dar el paso decisivo y solicitar su ingreso en la Alianza Atlántica. Una muestra más, según los aliados, de que el presidente ruso, Vladímir Putin, se equivocó al pensar que atacando a Ucrania debilitaría a Occidente.