Fichajes mediáticos llevados en persona por los jefes
La precampaña se ve sacudida por incorporaciones inesperadas
Uno de los grandes dramas de la política de los últimos años era la enorme dificultad para incorporar profesionales independientes a un mundo cada vez más enrarecido, donde el nivel de control y de exigencia es enorme y las batallas internas, como la que se ha vivido ahora con las listas, dejan muy mal sabor de boca en personas poco acostumbradas a la vida orgánica. Sin embargo, esta vez parece diferente. Los partidos están demostrando una importante capacidad de incorporar fichajes de los que ellos llaman “sociedad civil” —como si la política no lo fuera— con algunos nombres muy mediáticos que están dominando la precampaña.
La nueva oleada la empezó Pedro Sánchez, que en la formación de su Gobierno logró incorporar a profesionales ajenos hasta entonces a la política —como el juez Fernando Grande-Marlaska, la fiscal Dolores Delgado, el presentador Máxim Huerta, que dimitió a la semana, y el astronauta Pedro Duque. Sánchez siguió fichando para Madrid al entrenador de baloncesto Pepu Hernández, pero ahora en las listas definitivas solo ha incorporado como gran fichaje al intelectual Sami Naïr como eurodiputado.
El PP ha tenido mucho más claro que necesitaba fichajes mediáticos. Aunque aún no ha terminado su elaboración de listas —solo tiene decididos los que las encabezan en el Congreso— ya ha habido varias sorpresas, con los periodistas Pablo Montesinos, como número uno por Málaga y Cayetana Álvarez de Toledo por Barcelona como estrellas. Pero los populares no se han quedado ahí, y han fichado a Juan José Cortés, padre de Mariluz, la niña de cinco años asesinada en 2008. Este último ha sido el más polémico.
Ciudadanos, que en varias provincias se ha especializado en fichar periodistas locales conocidos o caras mediáticas como la del humorista Felisuco, también dio la sorpresa este fin de semana con Marcos De Quinto, exvicepresidente de Coca-Cola y Edmundo Bal, el abogado del Estado relevado por el Gobierno del juicio del