Bolt eclipsa el entrenamiento del Dortmund
El jamaicano participa en la sesión del equipo alemán ante más de un millar de aficionados
En pleno parón de selecciones, con la mayoría de sus estrellas repartidas por el mundo, el entrenamiento de ayer del Borussia Dortmund se convirtió en uno de los eventos con mayor trascendencia de la jornada. Así lo confirmaron los casi 1.500 aficionados y 150 periodistas que se acercaron a las instalaciones del conjunto alemán. El motivo, Usain Bolt. El hombre más rápido de la historia irrumpió en la rutina del Dortmund y fue uno más en la sesión. Con Puma, la marca que viste a ambos, a Bolt y al equipo germano, como promotor y gran beneficiario de la inciativa, el jamaicano, de 31 años, sigue insistiendo en su deseo de convertirse en futbolista profesional.
Ayer, rodeado de ellos, llegó incluso a anotar un gol en el partidillo que clausuró la sesión, de algo más de una hora de duración. Fue de cabeza en el primer balón que tocó. El tanto provocó la euforia de un público entre el que se colaron dos banderas jamaicanas y al que satisfizo el excorredor al final del entrenamiento con firmas y fotografías. “Me esforcé al máximo. Quería hacerlo lo mejor posible, dar soluciones a mis compañeros”, comentó después. “Me he sentido bien, pero necesitó práctica y mejorar mi condición física. Me queda trabajar para llegar a un cierto nivel”, reconoció.
Fue el segundo día de Bolt en la ciudad alemana. El jueves conoció las instalaciones del equipo con Mario Gotze y Marco Reus, dos de las estrellas del grupo de Peter Stöger, como guías. Después, participó en la sesión a puerta cerrada que programó el técnico austriaco. “Ya hace un año y medio Usain Bolt se puso en contacto con nosotros. Se está entrenando con nosotros y ha solicitado una evaluación seria del equipo de entrenadores para saber si además de su velocidad, también cuenta con talento para el fútbol”. Usain Bolt participa en un rondo durante el entrenamiento de ayer del Borussia Dortmund.
Y es que su ambición no se limita solo a participar en un par de entrenamientos. Ni siquiera a competir con un equipo de bajo rango. La meta de Bolt es jugar en una de las grandes Ligas europeas. “Mi sueño es el Manchester United”, dijo de primeras, “pero el objetivo es jugar en uno de los mejores campeonatos del mundo. Por eso estoy aquí. No quiero jugar en una división inferior”.
El entrenador del Borussia Dortmund, Peter Stöger, fue diplomático al referirse al potencial y posible futuro del jamaicano en el mundo del fútbol. “Lo principal es que se vea que ama este deporte y que comprende el juego. Si quiere llegar al alto nivel tiene todavía mucho por hacer. Solo le he visto entrenar dos horas y media, no me puedo pronunciar”, dijo Stöger sobre la posibilidad de que Bolt se convierta en futbolista. “Pero si trabaja varias semanas, o varios meses con un equipo, puede progresar”, avisó el técnico sobre “un muchacho muy tranquilo y muy simpático”, que revolucionó las prácticas habituales del Dortmund.
Si no hay sorpresas, su siguiente aparición futbolística se producirá el próximo 10 de junio. Ese día, Bolt será capitán en un partido benéfico en Old Trafford, estadio en el que sueña con jugar de manera profesional