Todo acondicionado para darse el primer chapuzón
Durante estos meses es preciso que la piscina goce de un buen cuidado y mantenimiento Su puesta a punto parte de una limpieza previa y de la comprobación de los niveles de pH
Conforme las altas temperaturas hacen acto de presencia, las piscinas se van convirtiendo en el principal refugio donde mitigar el calor. Para disfrutar de ese primer chapuzón del verano cuando el sol ya empieza a calentar, es preciso que estas instalaciones gocen de las condiciones óptimas para el baño. Un buen mantenimiento y la utilización de productos de limpieza e higiene se plantean vitales para su conservación y correcto funcionamiento.
Tras los meses de invierno, donde se acumulan una gran cantidad de hojas y residuos varios, es necesario proceder a un trabajo de limpieza profundo. Sin un correcto tratamiento químico, el agua estancada que se acumula en el fondo de las piscinas provoca la formación de algas y bacterias. Para proceder a su eliminación, será precisa la utilización de productos como cloro y algicidas, además de contratar a personas especializadas que realicen de forma efectiva el denominado «bloqueo de piscinas».
Previo al llenado, hay que limpiar concienzudamente el fondo de la piscina y asegurarse de que no se hayan registrado daños en la superficie. Si se presenta alguna anomalía, habría que aplicar masilla para reparar los desperfectos. Una buena fijación de este material en los suelos se plantea fundamental para evitar filtraciones, lesiones, cortes o caídas por deslizamiento.
En esta puesta a punto también es importante realizar un correcto mantenimiento durante los meses que está en uso. Una de las tareas principales es la compra de productos químicos y medidores del nivel de pH- el cual debe manternerse en un rango de acidez entre el 7.2 y el 7.6- y un cepillo limpiador de fondo. Asimismo, los expertos recomienda que semanalmente se añada un al- gicida para prevenir el crecimiento de este tipo de plantas y añadir un fluocorante para que las partículas que enturbian el agua se agrupen y, de esta manera, puedan ser capturadas por los filtros o recogidas con el limpiafondos.
La calidad del agua depende en buena parte de los filtros por lo que es básico la limpieza periódica de los mismos, una actividad que puede desempeñar una persona con conocimientos sobre tratamiento químico y mantenimiento correcto de estos elementos. Asimismo, desde el Ministerio de Sanidad se aconseja a los usuarios que corroboren que los productos utilizados están homologados y cumplen la normativa vigente. Sumado a ello, para poder garantizar el disfrute de los usuarios, es vital la contratación de socorristas. El número de profesionales necesarios varía en función de su superficie o números de vasos (superficie cubierta de agua) .