«Cuando vendes la moto de subir casi con la gorra metes una presión bestial al equipo»
que ir todo muy bien. Todo eso el año anterior se vivió y en este no, seguramente porque los que estuvimos dentro no supimos plantear la mejor manera para canalizar esa energía.
—¿Estuvo de acuerdo con los fichajes que se hicieron?
—Hay éxitos evidentes y fracasos sonados. Para mí fue una gran decepción la salida de Mikel, que se fue por una situación particular que yo desconocía, y había un tema claro que era el delantero, se nos iba uno de un nivel estratosférico que era muy difícil de sustituir. Hicimos todo el verano con Jeison (Medina) y Marc (Gual) acabó viniendo la última semana de pretemporada y Álvaro con la Liga empezada. Yo cometí muchos errores, pero otros también.
—Víctor pidió más poder de decisión en la parcela deportiva ¿Quién debe fichar, el director general o el entrenador?
—Lo ideal es ir de la mano. En el
—¿Con qué se ha quedado de esta experiencia?
—Con el conocer todo lo que implica el zaragocismo. Esa afición se merece un equipo de Primera. Y se me quedó la frustración de no haberlo disfrutado más tiempo. Lo que quiero es que el Zaragoza vuelva cuanto antes a la élite, ojalá sea ya esta próxima temporada, su gente lo merece.
—Le ha ido bien en su regreso a Chipre, al AEK Larnaca...
—Tras salir del Zaragoza pasé unos meses malos y, cuando me llamó el AEK, no lo dudé, allí me tratan de maravilla. Cuando llegué el equipo estaba en problemas, acabamos segundos y con alguna opción de disputar la Liga. Acabo de renovar, porque valoro estar en los sitios que me quieren y pudiendo decidir y ser parte de los proyectos. Del Zaragoza salí con un montón de enseñanzas y una es que, si vuelvo a LaLiga, lo haré donde me dejen desarrollar mis ideas. He aprendido que por estar en un sitio que te parece espectacular pagas un precio que no merece la pena.
☰