La Justicia inaugura su primera sala para que declaren los niños
Esta instalación permite aumentar las garantías procesales de grupos vulnerables La Cámara Gesell se pondrá en funcionamiento el próximo 2 de enero
El Gobierno de Aragón ha instalado en la Ciudad de la Justicia en Zaragoza una Cámara Gesell para aumentar las garantías procesales y la seguridad jurídica de grupos vulnerables como pueden ser los menores, las personas con discapacidad intelectual o las víctimas de violencia de género. La consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales, Mayte Pérez, acompañada de la directora general de Justicia, María Ángeles Júlvez, visitaron ayer las instalaciones que han supuesto una inversión al Gobierno de Aragón en torno a los 15.000 euros y que se pondrá en funcionamiento el próximo 2 de enero del 2020. Mayte Pérez explicó que se trataba de una apuesta para «mejorar el servicio de la justicia» que permitía, de alguna manera, «proteger la vulnerabilidad, sobre todo de los menores, para que no se cohíban en su propia declaración».
La Cámara Gesell es un espacio acondicionado para realizar entrevistas que permite su visualización desde otra sala contigua a través de un vidrio con visión unidireccional. Principalmente requiere de tres espacios: una zona de espera del menor, la zona de entrevista y la sala de visualización. En la sala de entrevistas el menor entrará con un psicólogo y, en un ambiente mucho más cálido que unos juzgados, responderá a las preguntas que el psicólogo irá adaptando a medida que, gracias a un pinganillo, vaya recibiendo órdenes desde el otro lado del cristal donde se encuentra el juez y todas las partes implicadas, incluida la defensa. La misión del psicólogo es obtener un testimonio lo más nítido y veraz posible atendiendo a las características de la persona a la que se esté juzgando, que se encontrará con una mayor autonomía y sin el miedo que tienen en los juzgados a estar observados.
En la sala de visualización es donde se encuentra el equipo de grabación, tanto de audio como de vídeo, cuya penumbra evita ser percibido desde el otro.
A pesar de que el uso concreto tendrá que decidirse en un futuro a medida que se vayan viendo las necesidades, el objetivo del Gobierno de Aragón es usarla en todas las ocasiones donde se requiera una privacidad y se considere que esa prueba puede estar mejor realizada es un sitio como este. «Hecha la instalación y teniendo el servicios, nos pondremos a disposición con el Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA) y con todo el sector y ver hasta dónde puede utilizarse», explicó Pérez.
Una de las ventajas que la Cámara Gesell otorga es la reducción de veces que una víctima puede llegar a declarar, hasta más de tres veces entre Policía, Juzgado de Instrucción y juicios orales, debido a que cuenta como una prueba preconstituida, es decir, que tiene validez de cara al juicio. Esta calificación libra al menor de tener que volver a declarar con lo que se evita una doble victimización, según explicó el presidente del TSJA, Manuel Bellido, que consideró que acudir a un proceso judicial supone «un gran coste personal a la hora de recordar situaciones o ser interrogado», por lo que consideró que «cuantas menos veces, mejor». Además, Bellido hizo hincapié a la obtención de unas «mejores declaraciones» porque se hace en un contexto donde la persona «es interrogada por un experto, puede expresarse más libremente y al mismo tiempo con las mismas garantías legales».
Aragón ya cuenta con una Cámara Gesell en el Palacio de la Justicia de Huesca desde hace menos de dos años y que se ha usado en menos de una veintena de ocasiones.
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