Remate final y puesta en servicio
Los municipios de Escatrón, Chiprana y Samper de Calanda han vivido en el último año una frenética actividad debido a las obras de construcción del macroproyecto fotovoltaico promovido en la zona por el grupo Cobra, perteneciente a la multinacional ACS. Se trata de la mayor instalación energética de este tipo que se pone en marcha en Europa con una potencia conjunta de 850 megavatios (MW) y un total de 3.173 hectáreas de superficie entre las 18 plantas que abarca. Los trabajos se encuentran en la fase de remate final. Algunos de los parques solares han empezado ya a funcionar y el resto lo harán en breves fechas.
El volumen de trabajadores ha sido muy elevado debido a la magnitud de la obra y los ajustados plazos para su puesta en marcha, que debe producirse antes del próximo 31 de diciembre al ser un proyecto acogido al régimen de la tercera subasta de potencia renovable. En algunos meses se han alcanzado puntas de más de 500 empleados directos. El número de empresas implicadas en los trabajos ha sido también muy numeroso.
La inversión en el proyecto ronda los 500 millones de euros por lo que se trata de una iniciativa única que situará a la comunidad aragonesa a la cabeza de las energías renovables a nivel mundial. Cobra ha desarrollado aquí 850 MW, el 54% de los 1.550 que se adjudicó en la tercera subasta de renovables. Escatrón es el epicentro de este complejo fotovoltaico al acoger en su término diez de las 18 plantas, mientras que cinco están en Chiprana y otras tres en Samper de Calanda. La iniciativa fue priorizada por el Gobierno de Aragón, lo que acortó los plazos de tramitación.
Las obras de construcción se han enfrentado a algunos contratiempos. En la recta final de los trabajos, el fuerte viento registrado a mediados de noviembre --con rachas de hasta 75 kilómetros por hora-- jugó una mala pasada a la instalación al hacer volar decenas de paneles solares. A pesar de ello, la empresa prevé cumplir los plazos.
Los trabajos de construcción han alcanzado puntas de más de 500 trabajadores