Los ángeles invisibles
El 061 Aragón está a las puertas de cumplir 20 años y pese a su implantación, sus responsables y trabajadores creen que su trabajo pasa desapercibido, lo que quieren paliar aprovechando el aniversario
El año que viene se cumplirán 20 años desde que los servicios de emergencias y urgencias sanitarias se agruparon bajo la marca del 061, y aprovechando la efeméride, el servicio quiere aumentar su visibilidad entre la sociedad, pues tanto los gestores como la plantilla consideran que sigue siendo su asignatura pendiente, sin contar las carencias, sobre todo fuera de la capital aragonesa.
Por eso iniciarán una serie de acciones de promoción que tuvieron su prólogo el pasado fin de semana, con dos jornadas de puertas abiertas en las que los trabajadores, con las ambulancias expuestas, explicaron al público su labor y el funcionamiento del servicio.
En la plaza España de Zaragoza, el sábado, atendía la doctora Belén Mainar, de las que mejor conocen el servicio y su evolución dado que lleva trabajando en él desde el principio, y ya llevaba otros tantos años como médico de emergencias en otras estructuras.
Según explicaba, «la gente se queda atascada entre bomberos y el 112», porque, pese al tiempo transcurrido y el sencillo teléfono, «no saben cómo acudir a nosotros». Un problema que se solventará con la futura fusión con el teléfono de emergencias, que aún no se concreta.
Mainar recordaba el enorme desarrollo de la estructura, que hace 20 años comenzó con «un solo vehículo para todo Aragón». Aunque en un par de años
El primer año había un solo vehículo para todo Aragón, hoy son 80, con 325 trabajadores
Llevamos desde la anterior legislatura reclamando al Ayuntamiento de Zaragoza la apertura de centros públicos fuera del horario lectivo. Para nosotros es importantísimo el mantenimiento de actividades por la tarde para dar respuesta a las necesidades de conciliación de las familias a la par que se desarrolla la formación complementaria, extraescolar, cultural, deportiva o de ocio de los niños.
En la optimización de los recursos públicos que debe procurar toda administración no se puede concebir que las escuelas limiten su uso y acceso a un tiempo meramente académico. Por eso, nuestro modelo educativo necesita de unas escuelas que sean el referente de nuestros hijos, de los vecinos de cada barrio. Un espacio físico de aprendizaje donde se for
Equipo ya eran cerca de 40, y hoy en día se ha duplicado el parque, con 80 (35 en Zaragoza, 23 en Teruel y 22 en Huesca) con 325 personas trabajando.
Mainar explicaba que el trabajo «es atractivo, pero te tiene que gustar», porque la medicina de emergencias termina siendo una especialidad con muchas peculiaridades.
Sorprende, eso sí, la falta de visibilidad social con un trabajo abundante y creciente. No en vano, según reflejaba la última memoria publicada del servicio, del 2018, respondieron a 346.339 llamadas, que se tradujeron en la atención de 150.836 personas. Uno de sus registros más altos, solo superado por los 151.732 pacientes del año anterior.
Además, el servicio tiene altas valoraciones entre los usuarios en las encuestas de satisfacción que se realizan, periódicamente. Sobre todo en el trato humano, superior al 92 sobre 100. También en la atención telefónica (92), del equipo de emergencias (87,5) y el tiempo de espera para ser atendido, que recibe el peor registro, con 81.
El servicio cuenta con múltiples ramas, como los equipos que colaboran con la Guardia Civil en las intervenciones en montaña, que atendieron a 338 personas el año pasado.
Entre sus carencias, como lamentan los sindicatos, siguen estando las bases operativas de las comarcas, a menudo inexistentes, entre otras faltas de medios materiales y personales.
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