«No hay ningún control, eso no lo vamos a consentir»
El presidente de los taxistas anuncia paros y movilizaciones «si no se arregla pronto» Morón se reúne hoy con el ayuntamiento y la DGA para reconducir la situación
No ha tardado en reaccionar el sector del taxi a la llegada de Cabify, la plataforma de movilidad que ha sido capaz de poner a casi todo el mundo de acuerdo en menos de una semana en la ciudad. Adelantó en este diario Mariano Morón, presidente de la Asociación Provincial de Autotaxi de Zaragoza, que la situación producida en los primeros días «es una auténtica vergüenza», con incumplimientos «a todas horas» que han alterado a los taxistas. Ya piensan en tomar medidas si no les presentan una solución temprana: «Mañana (por hoy) tenemos dos reuniones muy importantes, en el ayuntamiento y la DGA. Si no salimos contentos y vemos que esto no se arregla, convocaremos paros y movilizaciones. Así se lo voy a comunicar a todos. No ha habido ningún control y el taxi esto no lo va a consentir».
Desde el principio tuvieron claro los taxistas los problemas que traerían las VTC. «Antes de que empezara a operar Cabify me reuní con la concejala de Servicios Públicos, Natalia Chueca; con el intendente de la Policía Local, Juan Manuel Maroto; y con Gregorio Briz, director general de Movilidad, para pedirles que intervinieran. Ya sabíamos la reputación con la que llegaban. El día 4 empezaron a trabajar y desde entonces se han saltado todo el decreto: no han respetado los 15 minutos, han alquilado en la calle, han dado vueltas arriba y abajo a ver si les entraba un servicio o han aparcado en zonas estratégicas de ocio, por ejemplo en Camino las Torres. Allí vi yo tres una noche a las 3 y pico de la mañana. Tenemos, además, muchas capturas de pantalla que demuestran que te dan el servicio en 4 o 6 minutos. Como para tardar 25 minutos que sería el mínimo aproximado que les debería costar...».
Las fricciones llegaron en el primer fin de semana de Cabify en Zaragoza. Incluso alguno de ellos lo vivió Morón en primera persona al comprobar que estos vehículos estaban incumpliendo normas pero no eran multados ni reconducidos. «Di a los compañeros instrucciones de que si veían una VTC haciendo algo irregular, que llamaran a la Policía. Llamadas hubo muchísimas, hasta se cansaron de atendernos», explicó el presidente de los taxistas, que reconoció que en el sector están «muy molestos porque no sabemos si a la Policía no le han dado las instrucciones correspondientes o si se los han dado y no están cumpliendo».
Mariano Morón PRESIDENTE DE AUTOTAXI «No sabemos si a la Policía no le han dado las instrucciones o si no están cumpliendo»
Estos primeros días les / han servido, además, para acumular pruebas de todo tipo. Por ejemplo, «vídeos de la noche del 5 de marzo cogiendo gente en Independencia. Unos jóvenes vieron el coche negro, miraron la matrícula, tocaron el cristal y se montaron. Había dos taxis en la parada de al lado», explica Morón, que ayer acudió a los grupos «para que pidan explicaciones a Servicios Públicos y Policía».
La respuesta le llegó pronto, con una cita para hoy con Patricia Cavero, consejera de la Policía, y el superintendente Antonio Soriano; y otra convocada por Gregorio Briz, director de Transporte, con Natalia Chueca, el coordinador Luis García Mercadal y Juan Manuel Maroto. «Mi idea es exponer lo que debe hacerse. Los fines de semana podrían dedicar dos o tres patrullas a vigilar a las VTC en los tres puntos calientes de ocio en Zaragoza. Y que no esperen que haya una infracción, que aleatoriamente los paren y miren la hoja de ruta. Y si no incumplen, pues sanción. Si mantienen eso tres meses, en Cabify verán que no van a poder hacer lo que les dé la gana».
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