“El temor se multiplica por el miedo a un posible contagio”
Sigue teletrabajando desde casa, como si nada hubiera pasado, pero lo cierto es que la crisis desatada por el coronavirus también ha trastocado su rutina, pero ahora los pacientes la requieren aún más si cabe. Ana Isabel González es la responsable del área psicosocial de la AECC en Zaragoza, donde lleva 15 años trabajando, y junto a su equipo sigue «al pie del cañón» en la atención. «Les vamos llamando o videollamando y mantenemos las citas previstas, solo cambia que no son presenciales. Y si tenemos algún momento también contactamos con otros para ver cómo están. Se sienten muy agradecidos de que te acuerdes de ellos y les ofrezcas un rato de charla», dice González.
Aunque cada paciente oncológico puede estar pasando por una fase diferente, «el temor se multiplica» en aquellos que están en un tratamiento activo de quimioterapia. «Al miedo que ya de por sí genera el cáncer está el añadido de un posible contagio. Deben seguir acudiendo al hospital y es importante darles todas las garantías de protección y ayuda», señala.
También psicológicamente el coronavirus afecta a pacientes que habían vuelto a una rutina y «ahora sienten que la vida se les vuelve a parar». O aquellos a los que el aislamiento les afecta «por esa falta de contacto social», cuenta. «Seguimos estando con todos ellos», remarca la psicóloga .