El Periódico Aragón

La puerta de los Juegos sigue abierta para Luis Suárez y Vallejo

- EL MENSAJE

La FIFA ha confirmado en ▶▶ un comunicado que los equipos masculinos en los Juegos Olímpicos de Tokio serán sub24. Así pues, en España podrán jugar en Tokio 2021 los que clasificar­on a la selección para esta cita, entre ellos el canterano zaragocist­a Jesús Vallejo, que jugó el Europeo en Italia y San Marino del que España salió campeón y con ese billete olímpico. Vallejo, cedido en el Granada por el Real Madrid, nació el 5 de enero de 1997 y con esa ampliación tras ser pospuestos los Juegos podrá ir, lo mismo que el colombiano Luis Suárez, nacido el 2 de diciembre de ese año y que también tiene en mente esos Juegos y que puede disputarlo­s al haber jurado la Constituci­ón Española. La decisión final del delantero zaragocist­a, cedido por el Watford, solo será irreversib­le cuando sea citado y juegue con Colombia o España en su selección absoluta. Los Juegos se celebrarán finalmente del 23 de julio al 8 de agosto del 2021. La duda era saber si este aplazamien­to implicaría también un aumento de un año en la edad con la interrogan­te en los nacidos en 1997. Pues bien, la FIFA la ha resuelto y ha abierto la posibilida­d de que sean sub-24 los futbolista­s y no sub-23. y se me ponen los pelos de punta, tienes esa envidia sana. Hace unos días al salir del hospital estaba la gente aplaudiend­o y en ese instante me emocioné. No era solo para mí, sino para todos los que peleamos en primera línea. Pensé que no me cambiaba por nada».

El galeno zaragocist­a / reivindica la importanci­a de su profesión, pero no solo ahora. «Siento a veces tristeza porque somos los mismos que hace seis meses no teníamos ese reconocimi­ento. No somos héroes, no llevamos capa. No buscamos aplausos, sino respeto a nuestro trabajo y esperemos que cuanto esto pase sigamos teniendo el mismo que ahora», sentencia, lanzando un último mensaje: «Este partido solo se puede ganar siendo un buen equipo y necesitamo­s el aliento del público, cumpliendo las medidas del confinamie­nto. Seguro que así podemos vernos pronto en La Romareda».

—Volvió a Zaragoza a mediados de marzo tras lograr el título de la Superliga india con el ATK Kolkata. Contento por el éxito, ¿no?

—Por supuesto. La ilusión siempre la tienes cuando inicias una aventura así y es el primer título en los tres años que llevo allí. Ahora estoy feliz de estar en casa porque estábamos en la India con el miedo de si podríamos volver o no y lo pudimos hacer.

—En ese país había jugado en el Bengaluru ya, aunque el Kolkata es uno de los clubs más grandes y potentes, con muchos españoles en sus filas.

—La Superliga india solo tiene seis años de historia y el ATK es el tercer título que logra. Es el club más grande del país y ha tenido bastante presencia de españoles porque, cuando se fundó, tenía una especie de convenio con el Atlético de Madrid, que mandaba allí al entrenador y a algunos jugadores. Esta temporada ha estado Antonio López Habas de técnico y allí hemos jugado Javi Hernández, Agus, Mandi, Víctor Monjil y yo.

—En el verano del 2017 el Zaragoza decide no ejercer la opción para prorrogar el contrato y usted coge las maletas para irse al Bengaluru. ¿Fue difícil tomar ese camino?

—No tenía en mi cabeza irme a la India, claro está, fue pasando el verano y apareció la opción del Bengaluru, que entonces también tenía un entrenador español (Albert Roca). Sentí dudas, no lo voy a negar, pero mi mujer es aventurera y muy echada para delante. Y dimos el paso.

—Muchos jugadores vuelven en seguida cuando se van a Ligas como la india o las de China, Japón o Catar. No se adaptan.

—No fue mi caso, pero eso no quiere decir que sea fácil. Te vas a un país con una cultura muy diferente. Y el fútbol es también muy distinto, ellos tienen poca historia y formación, les faltan cosas que aquí se aprenden desde pequeños, a nivel de táctica y de conocer el juego, aunque ahora ya están invirtiend­o más dinero en crear escuelas y esas distancias se acortarán seguro.

—¿Cómo está viviendo la temporada del Zaragoza?

—Muy ilusionado hasta este parón. Todos sentimos ese algo especial que no veíamos los años anteriores y tenemos la esperanza y la confianza de que esta puede ser de verdad la definitiva. Lo hacemos más con el corazón que con la cabeza, pero es que el equipo muestra muchas cosas para creer que va a ser de Primera. Ahora también está la incógnita de qué va a pasar por este parón y eso también nos aumenta a los zaragocist­as la incertidum­bre.

—El equipo estaba muy lanzado, el parón que ya va para un mes y será mucho más largo no es positivo en ningún caso.

—Eso seguro. Ya dure lo que dure a un equipo que va tan bien y tan lanzado no le beneficia. Mejor de lo que estaban es muy difícil que estén cuando esto se retome.

—¿Con quién habla del actual vestuario?

—Con el que más relación tengo es con Zapa. A nivel personal ha vivido una temporada difícil, pero como zaragocist­a está mordiéndos­e las uñas como todos para que acabe la Liga y se consiga un ascenso que lo merece todo el zaragocism­o empezando por él.

—Ha regresado a España y tiene que estar confinado en casa.

—Es frustrante tenerte que quedar sin salir y no ver a la familia.

—No sé cuál es la explicació­n de que no se haya propagado tanto en una población de 1.300 millones de personas. Al irme ya se estaban poniendo medidas y tomando precaucion­es, pero ahora, desde el 25 de marzo, el país está confinado. En una población tan grande y sin la sanidad que hay en Europa un contagio elevado sería algo devastador.

—Dice que va a renovar dos años más y ahora tiene 29. ¿Cuándo se ve regresando a España?

—A mí me encantaría estar en España y aún más en el Zaragoza. Eso sería maravillos­o. En mi cabeza está volver. Ahora, tras renovar, seguiré dos años en Calcuta y el siguiente contrato ya quiero que sea en mi país.

—Quedándose hasta finales de julio y, si se reanuda la competició­n, podría hasta celebrar el ascenso si se da. ¿Ya lo imagina?

—Solo de pensarlo se me pone la piel de gallina, me imagino en la plaza del Pilar, con todo abarrotado de zaragocist­as y cantando, gritando y llorando. Así lo visualizo. Ojalá eso llegue pronto.

—La intención de LaLiga y de la Federación es terminar la competició­n como sea.

—Soy sincero, si en mi mano estuviera la decisión, que terminara la competició­n y subieran los que están en ascenso directo. Pero es verdad que no es lo más justo. Si existe la posibilida­d de acabar, es la decisión de mayor justicia, que se juegue lo que queda y que decidan los puntos. La esencia del deporte es esa y hay que buscarla por todos los medios.

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SERVICIO ESPECIAL Edu García, con el trofeo de campeón de la Superliga india.

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