Solo el 10,5% de los ciudadanos decía el viernes que estaban
Poco o nada preocupados por el virus
ca al 90%, y esa cifra se mantiene en el tiempo prácticamente inalterable.
En la misma dirección debe entenderse que más del 93% de los consultados respondan que están confinados en casa. El dato cuadra con el endurecimiento del estado de alarma que dictó el Gobierno hace más de una semana, cuando se extendió a todos los trabajadores de sectores no esenciales.
Sin embargo, la cifra, que alcanzó su máximo el miércoles, cuando el 95,8% de los que respondieron a la encuesta dijeron que se mantenían enclaustrados, bajó más de dos puntos el viernes, hasta el 93,4%.
Pese a que algunas variables apuntan durante los últimos días a una mejora en los datos (tanto en el número de nuevos contagiados como en el de fallecidos y el de ingresados en las ucis marcaron ayer mínimos semanales), arrecian los llamamientos desde todas las instituciones a no bajar la guardia.
Lo cual no impide que, durante los tres últimos días de la semana pasada, más del 40% de los españoles consultados por el Gesop vaticinaran que en 15 días la situación habrá mejorado, por un poco más de un 10% que creen que habrá empeorado.
Entre tanto, la batalla política no cesa. Cada país tiene su propia historia a este respecto; en España, no hay tregua. Si en los primeros días el impacto hizo que se guardaran las formas, en las últimas jornadas la voluntad de buscar el desgaste del rival es evidente.
La derecha, sobre todo a través de sus terminales mediáticas, enarbola los números de España –el segundo país del mundo con más contagios– para atacar al Gobierno.
Hay niveles y niveles: el líder del Partido Popular, Pablo Casado, anunció que apoyará la extensión del estado de alarma otros 15 días, aunque criticó las trabas al «control democrático del Parlamento» que en su opinión ha
Técnica: entrevistas telefónicas.
Ámbito territorial: España.
Universo: residentes mayores de edad. Número de entrevistas: 750 entrevistas semanales. Margen de error: ± 3,65% para un nivel de confianza del 95,5% y p=q=0,5. . Trabajo de campo: del 23 de marzo al 3 de abril.
establecido Sánchez. Santiago Abascal (Vox) , por suparte, ni siquiera le cogió el teléfono al presidente.
El independentismo también ha acechado al Gobierno desde el principio. Primero, insistiendo en el «confinamiento total» –hasta que se produjo– y criticando la «centralización» de competencias con la que se ha afrontado la crisis. Y ayer mismo, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Quim Torra, avisó de que está en contra de que Pedro Sánchez suavice las medidas del estado de alarma a partir del 13 de abril, como es su intención.
¿Cuál es la impresión que va quedando en los españoles? Las sensaciones que deja el sondeo no son nada buenas para el Gobierno.
El desgaste de su imagen es evidente, y se recrudece día a día. El viernes, último día en que el Gesop hizo sus preguntas, fue el día con más críticos: el 42,9% creía que el Ejecutivo está actuando mal contra la crisis. El 21,6% decía ese mismo día que el Gobierno lo está haciendo «normal», mientras que el 30,3% mantiene una opinión positiva.
Sin tregua política
Un 34,7% de los encuestados afirma que la recuperación económica
Incertidumbre económica